Pettovello le tuvo que pedir la renuncia a una subsecretaria por gastar $2 millones en una cafetera - Política y Medios
07-11-2024 - Edición Nº6124

DESPILFARRO DE FONDOS PÚBLICOS

Pettovello le tuvo que pedir la renuncia a una subsecretaria por gastar $2 millones en una cafetera

Una nueva denuncia pública de Grabois derivó en la salida de otra funcionaria del Ministerio de Capital Humano, en esta ocasión por la compra con sobreprecio de un oneroso electrodoméstico realizada con dinero de la cartera.

La subsecretaria de Gestión Administrativa de la Secretaría de Niñez y Familia, Constanza Cassino, es la nueva baja de Sandra Pettovello en el Ministerio de Capital Humano, luego de que Juan Grabois denunciara la compra millonaria de una cafetera con fondos públicos.

Pettovello debió pedirle la renuncia a la funcionaria, luego de "tomar conocimiento de la situación relacionada con la cafetera", electrodoméstico por el cual, la cartera que retiene toneladas de alimentos para no entregarlos a los comedores comunitarios, abonó $1.917.000.

En consecuencia, en medio de las repercusiones escandalosas del caso, Cassino acató el pedido de la ministra presentó su renuncia con una nota que reza: “Tengo el agrado de dirigirme a usted, a fin de presentar mi renuncia a partir del 31 de octubre de 2024, al cargo de Subsecretaria de Gestión Administrativa de Niñez, Adolescencia y Familia de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia”.

Al igual que con el escándalo de las toneladas de alimentos comprados por el Gobierno anterior para comedores que se mantenían retenidas en galpones, incurriendo en el vencimiento de algunos lotes, el responsable de que la situación saliera a la luz fue el líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois.

El dirigente social expuso una nueva situación de despilfarro de recursos públicos a favor de funcionarios a travpes de sus redes sociales, con un posteo titulado “los privilegios de Pettovello”.

Allí, Grabois cuestionó: “El cafecito con espuma con sobreprecio ($1,917,000) y los triples del catering de Pettovello (3 palos sospechosamente redondos) se pagan con 6444 raciones de almuerzo según el PNUD, ese que esta rocha perfumada le niega a los pibes”.

En la misma línea, puso de relieve que “el sueldo que la desnutridora cobra para dar charlas de nutrición (4 palos) vale por otras 5254 raciones” y agregó: “Ni sabemos de los sobresueldos pagados por la OEI repartidos entre personajes prostibularios, cirujanos plásticos y defensores de violines... la justicia está lentejuela con el asunto. Pagate el café vos, rata de lupanar”.

Lo cierto es que, desde su creación, el Ministerio de Pettovello ya cuenta con un extenso prontuario de denuncias de irregularidades y escándalos.

Desde el acopio de alimentos vencidos que inició la polémica y le costó el cargo de secretario de Niñez y Familiar a Pablo de la Torre, pasando por mecanismos de contratación irregulares de áreas de Capital Humano que incluían facturaciones de amigos de funcionarios hasta llegar a opacos giros millonarios desde la cartera a la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para comprar alimentos, los escándalos parecen ser más la regla que la excepción.

Por su contacto con los sectores más vulnerables, Grabois ha sido uno de los dirigentes que más veló por la transparencia en el manejo de los fondos y, a menudo, las denuncias fueron impulsadas por él.

Lo cierto es que la ministra Pettovello, de las preferidas de Javier Milei, se muestra inmune a los hechos de corrupción, impericia y en este caso despilfarro de fondos públicos, permaneciendo impoluta mientras sus soldados van cayendo con el correr de los meses.

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