A horas de un nuevo 24 de marzo, donde organizaciones, agrupaciones y partidos del campo popular volverán a conmemorar el terrorismo de Estado perpetrado por la última dictadura militar, el Gobierno nacional evalúa ensayar una nueva provocación a la oposición política y civil.

Desde hace varios días circulan, cada vez con más fuerza, rumores de que algunos sectores del entorno del presidente pujan por contraatacar a la movilización de cada año en reclamo de Memoria, Verdad y Justicia con un indulto a genocidas condenados.

Según trascendió desde los pasillos de la Casa Rosada, uno de los principales instigadores es Santiago Caputo, asesor estrella de Javier Milei, quien ya se puso en contacto con la vicepresidenta, Victoria Villarruel, de público vínculo con ex represores.

Para Caputo, la denominada “batalla cultural” ostenta una importancia similar a la acción en materia política y económica, y el objetivo es brindar un robusto gesto a favor de los ex militares condenados por delitos de lesa humanidad en el marco del juzgamiento por los crímenes perpetrados durante el Gobierno de facto.

Para Villarruel, se trata de una de las causas que ha defendido a lo largo de su vida. De hecho, parte de su -escasa- carrera la desarrolló como presidenta del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv), una entidad que apuntala en su narrativa la idea de una ‘guerra’ entre organizaciones armadas y el Estado, equiparando las acciones de ambas partes.

También fue fundadora de Jóvenes por la Verdad, un grupo que, entre otras actividades, coordinaba visitas al dictador Jorge Rafael Videla. Tiempo atrás, el esposo de la activista pro-militares Cecilia Pando, Pedro Rafael Mercado, había afirmado que fue a través de la ahora vicepresidenta que pudo tener una entrevista con el máximo ícono de la dictadura militar de 1976.

No obstante, al encontrarse en una posición institucional, la titular del Senado no deja que sus simpatías ideológicas afecten su investidura y, si respaldó el pedido de Caputo, lo hizo de la manera más discreta.

Lo cierto es que el Gobierno no pierde la chance de marcar la cancha con gestos conservadores en lo cultural, como la eliminación del Salón de las Mujeres en la Casa Rosada precisamente en el Día Internacional de la Mujer. Una orden de Karina Milei con un sentido esencialmente provocador.

Desde Balcarce 50 tienen claro que la del domingo es quizás la conmemoración más movilizadora y más transversal al campo popular, donde los más diversos partidos y agrupaciones confluyen con una agenda cuasi homogénea y sin mayores discrepancias.

A la vez, está claro que cambiar el nombre de un salón no es una medida equivalente a desafiar la constitucionalidad indultando desde el Poder Ejecutivo a condenados por delitos de lesa humanidad.

La propuesta de Santiago Caputo tensa por demás la cuerda institucional y de tolerancia civil hacia una administración que parece tener como política de Estado tantear los límites sistemáticamente y operar siempre en sus orillas.

En esa misma línea, este jueves se lo vio a Luis Petri en un acto realizado en el Círculo Militar de Rosario, donde se presentó un libro sobre el coronel Argentino del Valle Larrabure. La muerte del militar es una de las causas por las cuales sectores pro-militares buscan enjuiciar a militantes de organizaciones armadas.

En vísperas del 24 de Marzo, Luis Petri se fotografió en el Círculo Militar con Cecilia Pando y otras mujeres que reclaman la libertad de los genocidas pic.twitter.com/b5j7sYygcg

— Agencia El Vigía 🇦🇷 (@AgenciaElVigia) March 21, 2024

Allí, el todavía integrante de la Unión Cívica Radical (UCR) que encabezó el juicio a las juntas, se tomó fotos con Pando y un grupo de esposas de condenados por crímenes de lesa humanidad.

Cabe aclarar que la figura del indulto sólo puede ser aplicada por el presidente de la Nación, pero es cuestionada por la Justicia en materia de delitos de lesa humanidad, y está prohibida por la ley 27.156 para ese tipo de condenas.

En el circuito judicial, el debate gira en torno a si una Ley tiene prevalencia sobre un atributo constitucional del Jefe de Estado, contemplando que en el artículo 99 de la Constitución Nacional se le confiere al presidente la potestad de indultar.

Quizás contemplando este clima de época, la Cámara de Casación emitió este mismo miércoles un fallo con el que recordó que el indulto es “incompatible” en casos de lesa humanidad.