
La cuarta sección de la provincia de Buenos Aires es la más afectada por el cierre de escuelas rurales. Lincoln, Junín, Bragado, Chivilcoy, General Viamonte y Chacabuco son distritos donde la decisión del gobierno de María Eugenia Vidal generó preocupación en la comunidad educativa.
Fabio Britos, legislador provincial del Frente Renovador por la cuarta sección electoral, sostuvo a medios locales que "la medida parece impulsada desde escritorios por gente que poco y nada conoce del interior de la provincia de Buenos Aires, donde las escuelas rurales juegan un rol fundamental en la vida de los pobladores". También exigió que "Vidal revea algunas determinaciones".
Por otra parte, en General Viamonte, el bloque de concejales del Frente Para la Victoria (FPV) acompañó a la comunidad educativa de la región ante el cierre de establecimientos educativos. Además, lanzaron un fuerte comunicado en contra de la decisión de la Gobernadora: "Estas decisiones de política educativa tomadas desde la Jefatura de Inspección Distrital, en consonancia con los lineamientos de la provincia de Buenos Aires impactan en nuestra comunidad en una baja de la calidad educativa, en pérdidas de puestos de trabajos docentes y en el desconocimiento de los proyectos educativos que cada escuela viene elaborando para su comunidad" sostuvieron en el documento firmado".
Asimismo, el recorte en educación también llegó a la localidad de Chacabuco, gobernada por el radical de Cambiemos, Víctor Aiola. En este distrito se anunciaron la fusión de cursos, cierre de establecimientos y reducción del personal docente.
Desde el gobierno de Vidal, en palabras del ministro Sánchez Zinny, sostienen que no habrá recorte presupuestario en educación porque tanto los alumnos como docentes serán reubicados. Sin embargo, desde los gremios docentes y los sectores políticos que se oponen a la medida sostienen que "tienen una concepción mercantilista de la educación".