PANORAMA Y ANÁLISIS
El primer testeo electoral arrojó un balance positivo para el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, que enfrentaba una evaluación de su administración en los nueve municipios en donde se renovaban las bancas de concejales. Del total, en cinco quedó bien parado.
El frente del oficialismo, Juntos Somos Río Negro, festejó particularmente el triunfo apremiante en la localidad de Ingeniero Jacobacci, distrito que se distingue por la alta actividad minera.
En octubre, se eligen en la provincia patagónica tres bancas del Senado de la Nación y dos bancas de Diputados que deben renovarse, y desde el entorno del mandatario provincial interpretaron las locales como un puntapie inicial auspicioso.
El desdoblamiento de los comicios provinciales tuvo lugar en nueve localidades, en las que se renovaban entre una y dos bancas de ediles; y aunque pudiera parecer un recambio menor, en algunos casos significaba la diferencia entre conservar la presidencia del Concejo Deliberante o perderla.
Además, quien quedara en la posición más favorecida tendría unos seis meses para capitalizar esta suerte de victoria parcial y esperar que la intención de voto en el nivel nacional no se aleje demasiado.
En este sentido, si para el gobernador fue una buena prueba, el PRO se llevó una grata sorpresa con la buena performance en los distritos de Darwin y Pomona. En tanto, le peronismo sólo ganó en General Enrique Godoy, donde el intendente Albino Garrone reafirmó su liderazgo local y comienza a sacar chapa entre las nuevas caras del Partido Justicialista (PJ) provincial.
Como se mencionó, la victoria más celebrada fue la de Ingeniero Jacobacci, jurisdicción clave en la explotación minera, motor de la economía provincial. Allí el gobernador ratificó su alianza con la Unión Cívica Radical (UCR), que le permitió una trabajosa victoria sobre el peronismo.
El jefe comunal, José “Pepe” Mellado y su sello “Somos Jacobacci” obtuvo 1.191 votos, mientras que el justicialismo de “Unión por Jacobacci” -con el apoyo de la intendenta de General Roca, María Emilia Soria, y el senador nacional Marín Doñate- cosechó 1.052 sufragios.
Al respecto, el gobernador celebró: “Jacobacci eligió el futuro, eligió el trabajo, eligió seguir creciendo. Después de años difíciles, logramos recuperar la esperanza y hoy reafirmamos nuestro compromiso de seguir avanzando con más obras, más oportunidades y más Estado presente”.
El resultado reviste una importancia sustancial mientras avanza el proyecto de oro y plata Calcatreu, promesa de campaña del gobernador. A raíz de estos comicios, el oficialismo se encamina a recuperar mayoría legislativa.
Pos su parte, el peronismo vio desinfladas sus ambiciones de dar un batacazo en Sierra Colorada y Jacobacci, y debió conformarse con vencer en Godoy.
En diálogo con Letra P, el intendente Garrone destacó que “a pesar de la situación económica que todos los municipios atravesamos, logramos el triunfo. La gente nos acompañó, nos hacemos cada vez más fuertes en el circuito”.
Se trata de un cuadro de importancia en el peronismo, ya que tiende puentes entre el gobernador y el kirchnerismo provincial. En la provincia patagónica, se especula que detrás del intendente de General Godoy comiencen a encolumnarse diferentes figuras del justicialismo que a lo largo de los años se fueron acercando a Weretilneck.
El PRO, por su parte, logró un auspicioso segundo puesto en Darwin con su lista que encabezaba el legislador Juan Martín. A pesar de haber desbancado al peronismo y a Juntos Somos Río Negro, la aplastante victoria del oficialismo del intendente Víctor Hugo “Curi” Mansilla (UCR) le negó al partido amarillo una banca.
El radicalismo triplicó y más los votos de Martín: sacó 514 ante 140 del segundo, mientras el PJ llegó a los 116 votos y Juntos Somos Río Negro obtuvo 75.
A pesar del escaso peso del oficialismo provincial, el intendente y sus legisladores suelen acompañar a JSRN, por lo cual no representa un mayor riesgo para el mandatario provincial.
Por su parte, otra de las victorias que celebró el radicalismo fue la de Coronel Belisle. El intendente Diego Agüero sacó 650 votos frente los 308 del justicialismo. En tercer lugar, el oficialismo provincial se hizo de 142 sufragios. Se trata de otro aliado del gobernador que no ve amenazada su hegemonía en su distrito y colabora en la legislatura.
En tanto, en Sierra Colorada, Pilcaniyeu y Ñorquinco triunfó Weretilneck. Al menos a nivel local, La Libertad Avanza brilló por su ausencia en los comicios municipales de este 27 de abril. En octubre, la irrupción del partido de Gobierno podría ser el factor que desequilibre la ecuación que -en primera instancia- fue satisfactoria para el gobernador.
