En medio del conflicto con los diferentes gremios que nuclean trabajadores de Aeropuertos y Aerolíneas, las intenciones del Gobierno de privatizar Aerolíneas Argentinas adquieren fuerza en las últimas horas, luego de que fracasara el intento por hacerlo dentro de la Ley Bases.
La escalada de conflictos con los sindicatos en los últimos meses parece haber agilizado el rejunte de voluntades que el oficialismo necesita en el Congreso para avanzar en la venta de la aerolínea de bandera, apuntalada semanas atrás por el ex presidente, Mauricio Macri.
Por estas horas fuentes legislativas dejaron trascendet que La Libertad Avanza contaría con los votos para la media sanción en la Cámara de Diputados.
Desde el Gobierno buscan neutralizar los inconvenientes que generan las medidas de fuerza de los trabajadores, luego de que quedaran en evidencia las trabas para declarar los vuelos servicio esencial y obligar a los empleados a brindar una guardia mínima de servicios incluso en huelga.
Con la amenaza de privatización, se intenta disciplinar a los sindicatos para que moderen sus formas de protesta y también poner techo a sus pretensiones de mejora salarial. Más allá de si logran ese primer objetivo en lo inmediato, la apuesta de fondo es vender los activos de la empresa a operadores privados, en un proceso de adecuación administrativa que demandará al menos varios meses.
Este miércoles en la Cámara de Diputados iniciará el camino legislativo de la iniciativa oficialista, en un plenario de las comisiones de Transporte y Presupuesto, donde realizarán una presentación altos funcionarios del Poder Ejecutivo. De firmarse los dictámenes, la idea es llevar la votación al recinto el próximo miércoles 2 de octubre, cuando se tratarán los proyectos de Ficha Limpia y Boleta Única de Papel.
La decisión de apurar este plenario se tomó anoche en una reunión que mantuvo el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con diputados de la La Libertad Avanza y sus socios del PRO y el MID de Oscar Zago. La idea del Gobierno es avanzar con el proyecto del macrista Hernán Lombardi, que no establece demasiadas exigencias de control en el proceso de privatización.
El plan B es el proyecto de Juan Manuel López (Coalición Cívica), que cuenta con el apoyo de buena parte del radicalismo. Esta iniciativa exige que se respeten las disposiciones incluidas en la ley de Bases para proceder a la privatización, que contempla la participación de la Comisión Bicameral de Privatizaciones del Congreso, de la Sindicatura General de la Nación y la Auditoria General de la Nación (AGN).
En La Libertad Avanza son 39 integrantes y 38 votos dado que el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, no vota salvo desempate. Después se suman otros 38 del PRO y 3 del MID. A esta aritmética hay que incorporar al bloque Independencia de Tucumán, de tres miembros, Paula Omodeo de Creo y Lourdes Arrieta de FE.
Para llegar a buen puerto, el oficialismo requiere unos 25 votos de la UCR, desde donde admiten que "hay dudas, sobre todo por el tema de garantizar los vuelos al interior. El chaqueño Gerardo Cipolini, por ejemplo, que es de Sáenz Peña, planteó la preocupación. Los que son de lugares menos rentables son los que más van a estar atentos".
En Innovación Federal, que cuenta con 8 miembros, están mayormente en contra de la iniciativa, pero al menos los cuatro misioneros se abstendrían, según dejaron trascender a la prensa. El objetivo es no abrir una fuente de tensión con el Gobierno en medio de la negociación del Presupuesto.
Los votos en contra del proyecto vendrán mayoritariamente de Unión por la Patria, que tiene 99 representantes. Tampoco el Frente de Izquierda, de cinco integrantes, avala la venta o cesión de la aerolínea de bandera a manos privadas.
En Encuentro Federal, los socialistas Esteban Paulón y Mónica Fein no van a acompañar la privatización. "El debate no pasa por si queremos una Aerolínea privada o estatal. Sino por la eficiencia, que hoy garantiza conectividad. Aerolíneas Argentinas es la única que llega a 21 destinos del país, donde no llega otra compañía", argumentaron los dos santafesinos en una declaración de prensa conjunta.
Natalia de la Sota también rechaza la propuesta, según señalaron a la Agencia Noticias Argentinas fuentes del entorno de la cordobesa: “Ella está en contra de la privatización y a favor de la aerolínea de bandera que cubra las rutas con un carácter federal que ningún privado va a tomar por falta de rentabilidad”.
El resto de Encuentro Federal, que preside Miguel Ángel Pichetto salvando a Ricardo López Murphy, están en duda y reclaman “que vengan a explicar qué quieren hacer, pero por un conflicto gremial no se puede privatizar una aerolínea. Tienen que explicar qué quieren hacer, qué formato, qué metodología, qué beneficios al comprador”.