Radicales violetas

Javier Milei lo logró: cinco diputados radicales lo ayudaron a sostener el veto a la reforma previsional, que el Presidente dice no poder pagar, porque no hay plata. 

Los conversos fueron liderados por el tucumano Mariano Campero y el cordobés Luis Picat, quienes en enero iniciaron un diálogo con Patricia Bullrich para sumarse al oficialismo. 

Sumaron al misionero Martín Arjol, al neuquino Pablo Cervi y al correntino Federico Tournier. El catamarqueño Francisco Monti y la santacruceña Roxana Reyes estaban en la nómina pero no quisieron ir. 

Podrían sumarse la cordobesa Soledad Carrizo, como parte de un acuerdo en su provincia para aliarse con La Libertad Avanza. Esa es la principal oferta que recibieron los radicales violetas, nuevos animadores del parlamento. 

La pelea por el Presupuesto 

Javier Milei propuso un presupuesto “al revés”, en el que sólo se podrá gastar aquello que sobre de la recaudación, después de cubrir el déficit y pagar los compromisos de deuda. 

La propuesta del Presidente chocó con algunos reclamos de la oposición que deberá resolver en la próxima semana. El principal es que, en cualquier caso, le pedirán cumplir con los mínimos de coparticipación federal. 

Pero también hay un pedido para que Milei reduzca los gastos tributarios, como se llama al sinfín de excepciones fiscales que evitan al Gobierno de recaudación. El principal es el régimen especial de Tierra del Fuego. 

El debate lo coordinará el presidente de la comisión de presupuesto, José Luis Espert. 

Sin fondos para la Side 

Javier Milei sufrió un duro e inesperado golpe cuando el Senado votó en contra y derogó definitivamente el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 656, que incrementó en 100 mil millones de pesos la partida de fondos reservados de la SIDE. 

Como Diputados ya se había pronunciado en contra, la medida quedó anulada definitivamente, por lo que el Milei deberá explicar si gastó algún peso de esas partidas, aún cuando no tenían control parlamentario. 

La votación definitiva en el Senado llegó tras una presión de Martín Lousteau al bloque, que logró doblegar al jefe, Eduardo Vischi, y aportó el respaldo decisivo para construir una mayoría. Milei había reunido a las autoridades de los bloques dialoguistas para pedirle una semana de clemencia. No la tuvo.

Vetos totales

La construcción de un grupo de 87 votos fijos en Diputados, entre propios y aliados, suficiente para impedir que haya dos tercios en contra, entusiasmó a Javier Milei en su idea de vetar todas las leyes que impliquen gasto público.

Lo hizo con la reforma previsional, un veto que no pudo ser rechazado en Diputados, y repetirá el trámite con la ley de presupuesto universitario, que implica aumentos en las partidas para funcionamiento y personal.

Durante la presentación del Presupuesto 2025, Milei fue claro: no promulgará ninguna norma que implique gasto fiscal. Si no puede sostener el rechazo. De lo contrario, tiene decidido ir a la justicia para que defina qué partida recortar. 

Avanza juicio por jurados

Sin levantar demasiado la expectativa, el Gobierno avanza en Diputados con una agenda judicial que hasta podría tener acuerdos mayoritarios en los próximos meses. 

Es casi un hecho que habrá consenso para sancionar una ley de juicio por jurados, una deuda con la Constitución de 1893, que nunca fue saldada.

El oficialismo confía además en conseguir mayoría para sancionar la ley de baja de imputabilidad, aunque no a los 13 años, como pide Milei, sino a los 14. Sólo resta definir los procedimientos.

El otro tema que puede avanzar es el juicio en ausencia, que permitiría sentar al banquillo virtual a los acusados de la voladura de la AMIA