Los usuarios volverán a enfrentar aumentos en las tarifas de la luz y el gas en septiembre, no sólo por un ajuste atado a la inflación sino también explicado por un nuevo retiro de subsidios con el objetivo de paliar la pérdida que significará al Estado la reducción del Impuesto País.
Las boletas sufrirán incrementos de entre 4 y 6% y se suma a una serie de aumentos previstos en prepagas, combustibles, colegios privados y aguas.
El retiro de gasto público en concepto de subsidios al consumo energético viene a amenizar las consecuencias de la reducción del Impuesto País, en un contexto donde las presiones devaluatorias vienen obligando al equipo económico a emplear reservas de moneda extranjera para pisar el dólar blue y los financieros.
Caputo viene haciendo malabares para cumplir promesas de campaña -como la reducción impositiva- y metas devaluatorias -crawling peg de 2% mensual del dólar oficial-, y por el momento la vienen pagando las clases populares con los aumentos desmedidos que no parecen encontrar un cese en el corto plazo.
Con la reducción del Impuesto País, se alivió de un costo alto a empresarios que importaban, y el Gobierno busca cubrir ese vacío recaudatorio con más ajuste que se verá reflejado en las tarifas energéticas.
Los aumentos en este rubro son una constante desde la asunción de Javier Milei: la luz aumentó 75%, mientras que el gas se incrementó arriba del 500%.
Cabe recordar, además, que el Impuesto País ya había sido reducido durante la gestión de Unión por la Patria, cuando el ministro de Economía Sergio Massa lo dejó en 7,5%. Tributo que Caputo volvió a subir a 17,5 por ciento al asumir. Tras financiarse durante 8 meses, resolvieron volver a bajarlo al nivel donde lo recibieron.
En ese lapso, las arcas estatales lograron estabilizarse reduciendo subsidios en servicios energéticos y transporte, entre otros gastos, y eso permitió amenizar los gastos de importación y acceso a servicios extranjeros.
Sin embargo, parte del equilibrio de la gestión económica implica no descuidar la dinámica inflacionaria: con aumento de tarifas no hay fin de la inflación. A la vista de las decisiones, terminar con los aumentos no parece estar en los planes de Milei y Caputo.