
La diputada de La Libertad Avanza Rocío Bonacci admitió que evalúa apartarse del bloque de La Libertad Avanza porque se sintió “engañada” sobre los verdaderos motivos de la visita al genocida Alfredo Astiz en el Penal de Ezeiza. "Aparantemente, tenía el ok de Martín Menem y de Casa Rosada", soltó en una entrevista televisiva y volvió a responsabilizar al presidente de la Cámara de Diputados.
"Mi mayor error fue confiar en un colega de turno", dijo Bonacci en la entrevista al intentar nuevamente despegarse de la visita.
Es que formar parte del grupo de seis diputados que visitó a Astiz dejó una marca en Bonacci y en el resto de sus colegas que enfrentan pedidos de expulsión en la Cámara baja, mientras que Menem se mantiene en silencio y busca que el tema pase por alto argumentando que se trató de "decisiones personales", argumento que replicó el presidente Javier Milei.
Bonacci ya había buscado despegarse de la visita poco después de que se hicieron públicas las fotos de los legisladores con los represores, en las que la diputada eligió no salir. Entonces, la legisladora explicó que ella había entendido que la visita era para "tomar contacto directo con el sistema penitenciario federal y constatar concretamente la situación actual del referido complejo".
En ese descargo, la diputada insistió: "Cuando advertí que otros legisladores nacionales participantes de la visita a la cárcel de Ezeiza tomarían contacto y dialogarían con internos procesados y/o condenados en causas por delitos de lesa humanidad, decidí mantenerme totalmente ajena".
Ahora fue Lourdes Arrieta quien, además de utilizar el mismo argumento, dijo que su compañera de bloque agregó no sabía quien era Alfredo Astiz ni lo otros condenados.
“Estuve y hablé con Astiz. Yo no viví en esa época, nací en 1993 y no tengo ni idea de quiénes eran los personajes de esa época, la verdad es que vi internos de 80 años y yo no sabía los nombres, las caras y no tenía ni idea”, dijo este miércoles en diálogo con MDZ Radio.
“Fue una reunión que fuimos engañados un grupo de diputados. No puedo decir si todos lo sabían o no, pero en el caso de la diputada Bonacci y como yo, empezamos a hablar de este tema porque en un momento teníamos angustia y entramos en un estado de shock. Y en este tiempo me envalentoné y decidí salir a contar lo que fue”, fue la explicación que dio Arrieta sobre la visita.
Como Bonacci, señaló que nunca supo “que era a la Unidad 31, ni tampoco a ver justamente a los represores. A los cuales repudio completamente y a todo acto de violencia, sobre todo a los delitos de lesa humanidad”.
Además, agregó que “es un tema que no está en mi agenda que nunca lo estuvo, que no está en mi itinerario de actividades ni siquiera de proyectos. Hubo un juez que dictaminó que tienen que estar ahí y punto. Lo demás se tendrá que ver y hablar con los demás diputados”.