En las últimas horas, la intendenta de Quilmes y referente de La Cámpora, Mayra Mendoza, protagonizó un tenso cruce con su par del municipio de Avellaneda, Jorge Ferraresi, con quien abrió una nueva grieta dentro de la provincia de Buenos Aires y del Partido Justicialista (PJ) bonaerense frente al propio Axel Kicillof.

Según trascendió, Mendoza llegó a la Casa de Gobierno invitada por Kicillof para firmar un convenio de financiación de bienes de capital por $3.973 millones, pero no saludó ni al Gobernador ni a sus pares. “Esto traerá consecuencias”, esbozó la jefa comunal al poner su firma junto a la del mandatario bonaerense, aunque pareció una simple advertencia respecto de la poca convocatoria para el evento.

Sin embargo, al cruzarse cara a cara con Ferraresi, la intendenta de Quilmes no se guardó la bronca acumulada en los últimos días, y sin tapujos frente a todos los presentes lanzó: “Sos un cagón”. De acuerdo a las reconstrucciones posteriores, Mendoza cargó contra el ex ministro de Alberto Fernández por un acto que el jefe comunal de Avellaneda hizo el lunes en su territorio sin contemplar su presencia.

Vale recordar que Ferraresi realizó un acto en Bernal, localidad que pertenece a Quilmes, que no fue multitudinario, pero generó malestar en la intendenta de La Cámpora, que tomó la situación como un pésimo gesto del ex funcionario albertista. Además, el flamante intendente de Avellaneda es uno de los dirigentes peronistas que en el último tiempo más criticó al titular del PJ bonaerense, Máximo Kirchner.

“Son provocaciones. Armaron un acto contra la propia Mayra Mendoza en Quilmes y se sacaron una foto que busca representar al Gobernador que dice “todos con Axel”. Hablan mal de otros sectores del peronismo, promueven las divisiones y al otro día levantan el teléfono para hacer una nueva foto conjunta como si no hubiese pasado nada. Es un error garrafal político, porque lo único que hacen es romper el peronismo bonaerense y distanciar a los intendentes”, señalaron desde el entorno de la flamante intendenta camporista.

En la misma línea, desde la primera fila de dirigentes de Quilmes advirtieron que el conflicto no es “sólo porque fueron contra Mayra Mendoza o contra La Cámpora, sino que se convirtió en un modus operandi del círculo de intendentes más cercanos a Kicillof”. 

“En vez de estar unidos enfrentando a un Gobierno nacional que está hambreando al pueblo y destruyendo el aparato productivo, tenemos que estar soportando discusiones internas, extemporáneas y absurdas a tres años de las próximas elecciones”, reprocharon desde La Cámpora, que es la organización que protagoniza la interna con Kicillof por la conducción del PJ bonaerense, que tendrá elecciones el próximo 17 de noviembre.

Luego del enfrentamiento con Ferraresi, la intendenta de Quilmes evitó referirse públicamente al hecho y solo compartió en sus redes sociales imágenes del evento en Casa de Gobierno. “Con Kicillof y Juan Cuattromo, firmamos un nuevo acuerdo de Leasing del Banco Provincia para impulsar la gestión local. Mientras desde el Gobierno nacional suspenden las obras, desde la Provincia y el Municipio seguimos trabajando por la comunidad”, escribió.

Por su parte, Kicillof dejó al margen las discusiones internas y evitó por todos los medios hacer público el conflicto del peronismo dentro de la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, el Gobernador se preparará para ser el orador principal de un acto homenaje por el 50° aniversario del fallecimiento del General Juan Domingo Perón el próximo 1 de julio, donde se espera que, con su discurso, calme las aguas bonaerenses.

El acto en conmemoración al General Juan Domingo Perón, que se desarrollará en la Quinta de San Vicente que perteneció al ex presidente, volverá a posicionar al Gobernador de la provincia de Buenos Aires como una de las figuras predispuestas a pararse al frente de la conducción del espacio, una situación que genera tensión hacia el interior del espacio.

Si bien aún no se definieron las principales figuras de La Cámpora estarán presentes en San Vicente, las presencias y ausencias serán un factor determinante en el debate interno que atraviesa el peronismo en la provincia de Buenos Aires.