Con las consignas "La Patria no se vende" y "Pará la mano", la CGT paralizó el país por segunda vez para manifestar su descontento con las políticas económicas que impulsa el gobierno de Javier Milei.
La primera medida de fuerza había tenido lugar el 24 de enero, a 45 días del inicio del nuevo gobierno, e incluyó una masiva concentración en Plaza Congreso. Asimismo, la de este 9 de mayo incluyó un mensaje ampliado a otros sectores de la dirigencia política: "Este paro tiene varios destinatarios. No solo el presidente Javier Milei, sino los gobernadores y senadores que tendrán que tratar la Ley Bases, y también los cuatro o cinco grupos empresarios que son socios del Ejecutivo", afirmó Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE.
El ministro de Trabajo de Buenos Aires, Walter Correa, informó que en la provincia el acatamiento fue del 90%. El gobernador Axel Kicillof monitoreó la jornada sin agenda oficial desde La Plata.
En su cuenta de X el gobernador aportó un ejemplo que permiten dimensionar el daño que produce el ajuste: “Cada vez más argentinos y argentinas van perdiendo su fuente de trabajo. Según los últimos datos disponibles, entre noviembre 23 y enero 24, 32.500 trabajadores y trabajadoras de la construcción perdieron su empleo asalariado registrado; en la industria el número asciende a 3.000, pérdida que podría escalar a 5.000 en marzo y solo en el sector asalariado formal de la economía”.
Provincia adentro el paro también se hizo sentir, aunque los comercios abrieron sus puertas casi como en un día normal.
La Cámara Marplatense de Empresas Comerciales y de Servicios (Cameco), indicó que la actividad comercial en Mar del Plata tuvo una apertura del 90%. "La mayoría de nuestros asociados abrieron sus puertas, respetando el derecho a huelga, pero entendiendo que es fundamental trabajar para sacar el país adelante", manifestaron en un comunicado desde la entidad que conduce Juan Antonio Gutiérrez.
A pesar de la postura de los comerciantes, la medida de fuerza fue acatada por el 70% de los trabajadores marplatenses.
José Luis Rocha, secretario general, de la CGT local, confirmó que el acatamiento a la medida fue dispar y “cuestionó la falta de apoyo del sector empresarial, en especial de la industria textil que es fuerte en la ciudad balnearia: “Hace una semana la Cámara de Textiles estaba diciendo que han bajado las ventas, que están muy preocupados porque la apertura de importaciones va a hacer desaparecer la industria de textil de Mar del Plata. Bueno, nos gustaría que la industria de textil, los empresarios estén acá acompañando este paro", reclamó.
En otra de las principales ciudades de la provincia, Bahía Blanca, la Cámara de Comercio local, informó que el 80% de los comercios abrió, pero la jornada de protesta se hizo sentir en la calle. La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) junto con docentes y organizaciones sociales se movilizaron durante la mañana.
La recolección de residuos, la atención en los centros de salud públicos, el funcionamiento del cementerio, las dependencias municipales, así como la atención en los bancos y el transporte aerocomercial, experimentan alteraciones en su funcionamiento habitual.
Sin embargo, el Concejo Deliberante sesionó con normalidad y no atendió el reclamo de los ediles de Unión por la Patria que habían solicitado el cambio de fecha: "Que sesione el Concejo significa que no se reconoce a las instituciones. Cambiar de día no significa apoyar el paro, sino entender a trabajadores que están reclamando: administrativos, legal y técnica, todos trabajan en una sesión", dijo el edil de Unión por la Patria, Miguel Agüero.
En Tandil, un importante grupo de ciudadanos se reunió en la Plaza Independencia, para expresar su adhesión a la medida de fuerza, y en rechazo al tratamiento de la Ley Bases, que impulsa el gobierno de Javier Milei.
El titular de La Bancaria Tandil, Juan Manuel Carri, aseguró que el paró en el sector que representa fue del 100% y que se aseguró que los cajeros tuvieran dinero para no perjudicar a los ciudadanos.
"Esto no es un paro partidario, ni golpista, como algunos quieren enmascarar. Estamos hablando de hechos que yo, con mis 48 años, solamente los viví en los 90, con Carlos Menem, yo ya era bancario. La verdad que pensé que esto no lo iba a vivir nunca más. Y tener que estar viviéndolo hoy, ya siendo un abuelo como soy, en términos personales, creo que hay motivos sobrados para parar", aseguró el dirigente en su discurso en la plaza, frente a la municipalidad de Tandil.
Sebastián Hidalgo, secretario general de la seccional de Tandil del Sindicato de Camioneros y delegado regional de la CGT Tandil, aseguró: "En Camioneros tenemos un 90% de acatamiento a nivel país y también a nivel local. Y bueno, si para camioneros, para el país; y si para la UTA, también para el país" y resaltó lo que sucede con los profesionales de la salud en el municipio “hay que ser solidario con los demás sectores, por ejemplo, el estatal, algunos sectores minoristas, de salud, por ejemplo, salud municipal, que no puede ser que estén ganando entre 240.000 pesos y 300.000 pesos un enfermero, o algún municipal”, sostuvo.
La CGT de Tres Arroyos, informó que en esa ciudad el paro tuvo una adhesión del 70 por ciento.
"En líneas generales, en Tres Arroyos se dio un acatamiento del 70 por ciento. Hubo actividades que pararon al cien por ciento y otras que lo hicieron en un 60 por ciento. Estamos contentos con lo sucedido. Se vio muy poco movimiento, sobre todo a la mañana, cuando el paro más se hizo notar", señaló el secretario general de la CGT Regional, Rubén Carabajal.
Como en el resto de las ciudades bonaerenses el comercio funcionó con normalidad y el único hipermercado que no abrió fue la Cooperativa Obrera.
En Olavarría las oficinas municipales y estatales permanecieron sin atención al público como también ocurrió en los diferentes bancos y, mientras el comercio funcionaba con normalidad en el Paseo Jesús Mendía, se establecieron carpas del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y del Polo Obrero que con música, feria y micrófono abierto apoyaron el paro de este jueves.
En Las Flores, de acuerdo con la información brindada por UPCN, el nivel de acatamiento en las escuelas alcanzó un 95% y en el ámbito municipal, el paro fue acatado en un 97% de los trabajadores.
Suteba, resaltó que en San Cayetano, los docentes se adhirieron en un 100% al paro, demostrando un alto nivel de compromiso con la medida de fuerza.
En Necochea, a diferencia de otras ciudades, el comercio cerró y, especialmente durante la mañana, la ciudad se veía desolada a no ser por la movilización de más de dos cuadras que transitó por el centro para confluir en la plaza central. Tras una enorme bandera que llevaba la consigna “La patria no se vende”, la marcha fue encabezada por Demian Ledesma y Oscar Alberto Peralta, representantes de la CGT local.
En los hospitales públicos de toda la provincia, si bien el gremio de CICOP participaba de la jornada de protesta, las guardias atendieron con normalidad.
Con una caída del del 40% de la construcción y 20% de la industria y la imparable ola de despidos de empleados públicos y con la Ley Bases que cercena el derecho de los trabajadores debatiéndose en el Senado, aunque Milei y su gobierno no quiera reconocerlo, el paro del jueves, las movilizaciones en defensa de la universidad pública y la del 1º de mayo, son mensajes del descontento cada vez más generalizado hacía su política económica de ajuste.