El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recibió este martes a los 24 intendentes de la Unión Cívica Radical (UCR) en la gobernación con una comitiva de 7 ministros para dialogar sobre las problemáticas de los distritos y ganar representatividad en los reclamos al Gobierno nacional.

En un gesto político de unificación de voluntades ante la intransigencia de la administración de Javier Milei, que golpea fuerte la economía de diferentes sectores del país, el mandatario y sus funcionarios recibieron propuestas y demandas de los jefes comunales, trazando un diagnóstico de las problemáticas que atraviesan.

El intendente de Tandil, Miguel Ángel Lunghi, que resaltó la invitación de Kicillof,  puso sobre la mesa un proyecto que apunta a regular el precio de los insumos y medicamentos y apuntó a “trabajar en un acuerdo desde la provincia para impulsar en la Cámara de Diputados de la Nación el tratamiento de un proyecto de Ley con bases en la Ley Oñativia”.

Se trata de una normativa con sello radical, sancionada en 1964 durante el gobierno de Arturo Illía, que estableció un precio máximo a los medicamentos por ser un bien esencial.

Llegaría en un momento en que el Gobierno acaba de desregular los precios de las tarifas de servicios de internet, cable y telefonía móvil -que el Gobierno anterior había declarado esenciales-. Sobre la normativa del siglo pasado, Lunghi recordó que “durante 30 meses no aumentó nada, funcionó muy bien”.

La idea es que el gobernador pueda mover influencias para llevar al Congreso de la Nación un proyecto en esa dirección, al tiempo que brindó apoyo el reclamo de Kicillof en torno al reparto de los fondos coparticipables: “La provincia no es viable con la coparticipación, tiene el 40% de la población y recibe el 22% de coparticipación y eso hace no viable a los municipios”. 

Además, desde gobernacion también precisaron que los intendentes radicales recalcaron la necesidad de que continúe la obra pública provincial teniendo en cuenta la paralización de la obra pública nacional y el rol clave que esta cumple en la generación de empleo local.

En ese marco, Kicillof destacó que “el Gobierno nacional ha paralizado la obra pública y cortado drásticamente las transferencias a las provincias: el ajuste que está llevando adelante ya impacta en cada municipio en el que cierran las pymes y se deterioran los ingresos”.

Sobre esto, advirtió: “Nosotros no vamos a apoyar ningún tipo de recorte. Quienes coincidimos en que lo que necesitan nuestros vecinos y vecinas es más empleo, salud y educación pública, debemos trabajar en conjunto para dar respuestas más allá de nuestras diferencias”.

El jefe del foro de los intendentes radicales, Maximiliano Suescun, consideró que los municipios están “en una situación compleja y que es difícil sostener todo el tiempo”, y reconoció: “Estamos en una encrucijada, por eso la necesidad de trabajar en conjunto y de saco lo mejor de cada uno. Hay que optimizar el gasto, nos tenemos que poner de acuerdo para hacer con menos lo mismo”. 

Según trascendió tras el encuentro, que duró más de dos horas, muchos de los jefes comunales manifestaron cierta desorientación respecto a la postura de la UCR a nivel nacional en esta coyuntura, donde algunos de sus referentes se muestran más opositores y otros más estrechos a Milei y su alianza con el PRO.