Este significó el segundo contacto entre ambos, quienes habían intercambiado saludos en el marco de la ceremonia de canonización de Mamá Antula. Apenas superó los 60 minutos  el encuentro, y al finalizar el mismo, se le permitió el ingreso a la secretaria general Karina Milei y al resto de los ministros que formaron parte de la comitiva oficial.

La reunión entre Milei y el Papa se dio en el marco del deshielo de la relación entre ambos. Atrás quedaron los insultos a Francisco por los que el Presidente ya había pedido disculpas.

El Sumo Pontífice y el mandatario dialogaron sobre la situación política y económica de la Argentina. Fue una conversación franca, adonde confluyeron distintas miradas ideológicas, pero siempre en un mismo sentido: la manera de resolver la crisis, contener a los más pobres y gatillar el crecimiento productivo.

A pesar de a las fuertes palabras que había tenido para con la máxima autoridad de la Santa Sede, el Presidente, fue el jefe de Estado que más tiempo estuvo con el Papa en su primera reunión. Francisco le habría dedicado a su primer encuentro con Mauricio Macri en 2016 apenas 22 minutos, cuando lo visitó  Alberto Fernández en 2020, la reunión duró 44 minutos y con Cristina Kirchner estuvo menos de una hora en 2013, cuando la ex Presidenta viajó para su asunción, pero luego estuvieron otras 6 veces juntos; hubo incluso almuerzos de casi dos horas.

Luego del tradicional intercambio de regalos que el Pontífice mantiene tras finalizar una audiencia, el vocero Manuel Adorni, Milei entregó a Francisco una carpeta con la copia de la carta manuscrita del Canciller José María Gutiérrez a Juan Bautista Alberdi, acreditándolo como representante en Europa (mayo de 1854); un cuadro con la postal conmemorativa de Mama Antula que el Correo Argentino distribuyó en ocasión de su beatificación (agosto de 2017) y alfajores de dulce de leche y galletitas de limón.

Alrededor de las 6:20 de la Argentina, luego del saludo protocolar y las fotos de rigor, la comitiva oficial inició una segunda reunión dentro del Vaticano, esta vez con Pietro Parolín, secretario de Estado de la Santa Sede, que se extendió casi cincuenta minutos. Y tras un recorrido guiado por el Palacio, Milei y su hermana se retiraron del Vaticano a las 7:40 (11:40 de Roma).