MYRYAN PRUNOTTO
Varios distritos bonaerenses transitan estos días entre reuniones y designaciones. Mientras algunos se aprestan a vaciar los cajones de efectos personales, otros se prueban el traje que lucirán el día de la asunción. La democracia es virtuosa y cada cuatro años permite al ciudadano común ratificar o variar el rumbo político. De las unidades de gobierno, la más cercana es el municipio. Los políticos de pueblo transitan las mismas calles que sus electores, los hijos de oficialistas y opositores juegan en las mismas plazas y es muy probable que compañeros, correligionarios, amarillos o mileirianos, un domingo por la tarde, se abracen gritando el gol del club de la ciudad que salió campeón del regional.
Sin embargo, al momento de las definiciones políticas, se imponen los criterios ideológicos y convicciones que demuestran que al momento de gobernar no todo es igual. Tres importantes ciudades de la provincia, Bahía Blanca, Olavarría y Azul, cambian de intendente y partido político en el gobierno municipal.
En las tres ciudades la transición es ordenada. Los salientes recibieron a los electos y avanzan en el trabajo conjunto hacía el 10 de diciembre.
El intendente de Bahía Blanca, Héctor Gay, y su sucesor, Federico Susbielles, acordaron una prórroga en la presentación del Presupuesto 2024, que tenía fecha para el 30 de noviembre, para que el nuevo gobierno pueda analizar los números. Es que el anuncio del presidente electo Javier Milei de privatizar la obra pública, deja en la incertidumbre a las comunas.
En su reunión con los intendentes, el gobernador Axel Kicillof avisó que si la coparticipación se mantiene en los niveles actuales, habrá fondos para cubrir los servicios primarios y salarios generales, pero sin aportes agregados del Tesoro Nacional, no quedará resto para obras de desarrollo.
Es por eso que Susbielles no sólo se reunió con Gay: la semana próxima visitará al referente local de La Libertad Avanza, Oscar Libermán.
Libermán fue el candidato a intendente de los libertarios, es economista, ejerce la docencia en la Universidad Nacional del Sur y trabaja en el Conicet. El mismo Conicet que el líder de su espacio político quiere cerrar. Libermán, es optimista y piensa que con sus vínculos con Nación y los de Susbielles con la Provincia, “se puede hacer algo constructivo para Bahía Blanca”.
Por su parte, el alcalde electo reflexionó que “la ciudad necesita redefinirse con estrategias que la proyecten hacia el futuro”, y designó como secretario de obras públicas Gustavo Trankels, ex intendente de Tornquist y actual director regional de Vialidad Nacional.
Su equipo de gestión estará integrado también por Federico Montero, hombre de Sergio Berni, como secretario de seguridad; la periodista Virginia Pascual en comunicación; Natalia Martirena para el Instituto Cultural; Carlos De Vadillo en economía y Federico Bugatti como responsable de Salud.
El exsecretario legislativo del Senado y consejero de la Magistratura, Luis Alberto Calderaro, será su jefe de gabinete.
De los ocho jefes comunales que tiene la séptima sección electoral, cinco son parte de Unión por la Patria y tres de Juntos por el Cambio. Las principales ciudades por desarrollo y cantidad de habitantes son Olavarría y Azul.
En ambas, Unión por la Patria ganó las elecciones, desplazando a los actuales jefes comunales de Cambiemos.
El intendente electo de Olavarría es Maximiliano Wesner. “La Tota”, como lo apodan, comenzó con su militancia política dentro de lo que en su momento fue el Frente para la Victoria hace alrededor de 15 años. En 2021 fue candidato a primer concejal en la lista que llevaba a Federico Aguilera, actual Subsecretario de Minería de la Provincia de Buenos Aires. En la actualidad es titular de ANSES Olavarría.
Con el 41,42% de los votos se impuso en las elecciones para intendente, dejando en segundo lugar a la candidata de La Libertad Avanza, Celeste Arouxet, con el 28,15% y tercero al actual jefe comunal, Ezequiel Galli, con el 28,06%.
Galli y Wesner firmaron un acta para la transición de Gobierno, con el fin de asegurar que este período sea “transparente y responsable”. “Durante estas últimas semanas, todo el equipo estará a su disposición, porque la gestión efectiva y el trabajo en equipo también pueden realizarse en los cambios de gobierno”, aseguró Galli.
A diferencia de lo que ocurre en Bahía Blanca, donde el referente de Milei se propone colaborar con el nuevo intendente en beneficio de la ciudad, la referente en Olavarría, la concejal, Celeste Arouxet, cuestionó a Wesner: "Tiene una plataforma imposible de realizar, esperemos que cumpla todo lo que prometió", dijo.
“Se vienen momentos muy difíciles para Argentina, para la séptima sección y para Olavarría, así que esperamos que cada uno de los intendentes realicen su función con la responsabilidad que esta etapa necesita y apoyen al presidente en las medidas que hay que tomar para salir del pozo que nos metieron los partidos políticos de esos mismos intendentes”, arremetió Arouxet.
Por su partel, Galli reflexionó: “Las despedidas nunca son muy agradables, pero me voy con la frente en alto” y aseguró que se quedará en Olavarría y trabajará con su referente Diego Santilli en el armado de la sección electoral.
Podemos y el PRO de la ciudad de Azul, salieron a repudiar la propuesta de regularización de impuestos presentada ante el Concejo Deliberante por el Intendente Hernán Bertellys, en acuerdo con el Intendente electo Nelson Sombra.
A pesar de las quejas de estos sectores políticos y de la Sociedad Rural, la "tasa por servicios esenciales municipales" que en la última sesión del año aprobó el Concejo Deliberante, permite que 650 mil hectáreas rurales se sumen a la tasa vigente de servicios esenciales evitando que todo el peso recaudatorio recaiga en las 20 mil hectáreas urbanas.
Un impuesto que traerá un poco de oxígeno a las arcas municipales sumando 1.400 millones de pesos para ser destinados a infraestructura de salud, educación, transporte, deporte y cultura.
“Javier Milei dijo que los intendentes nos tenemos que hacer cargo de la obra pública, así que nosotros estamos trabajando en eso” dijo Sombra al ser consultado por la norma que podrá aplicar en 2024.
“Lo que tiene que quedar claro es que no se agrega ningún impuesto, sino que se regulariza una situación históricamente injusta por la cual solamente los frentistas del casco urbano pagaban una tasa de servicios generales, y ahora se pasa a llamar tasa de servicios esenciales, que involucra a todas y todos los azuleños”, agregó el intendente electo de Azul.
La modificación aliviana la carga sobre los casi 30 mil inmuebles urbanos que ya que no serán los únicos que aporten.
Sombra quiere en su gestión jerarquizar al trabajador municipal: “Vamos a llamar a concurso interno a todos los trabajadores y trabajadoras de la planta municipal para que presenten sus proyectos y para que puedan ocupar las distintas direcciones que necesitamos para poder llevar adelante los programas políticos", aseguró en rueda de prensa.
En cuanto a la composición del gabinete, Sombra ratificó que hay funcionarios que van a tener continuidad en algunas áreas y otros son perfiles nuevos, que eliminará todas las coordinaciones y que en cuanto a la situación financiera: “Hay una deuda muy grande con proveedores, que son vecinos nuestros. Eso amerita que, si el Municipio quiere comprar una lapicera, nadie se la quiere vender porque hay una deuda con el proveedor. O sino se la venden, pero como les pueden a pagar a 6 o 7 meses después, entonces esa lapicera vale 6 o 7 veces más. No hay manera de poder sostener un equilibrio fiscal con ese tipo de balanza económica o con ese tipo de acciones”, sostuvo.
En cuanto a la transición señaló que “al final se hará un acta que va a ser de público conocimiento, porque la comunidad debe saber la información de su propio territorio”.
En todas partes resuena la frase: "No hay plata y no se puede gastar de más". Hay una decisión innegociable de Milei de frenar toda la obra pública que no pueda sustentar la Argentina. Una gran parte de esta obra no es rentable desde lo económico, pero sí fundamental para mejorar la calidad de vida. La transición se vive entonces con preocupación por parte de los jefes comunales electos que con distintas estrategias para asegurar gobernabilidad y cuidar sus comunidades.
