Se viene el primer Festival Multiverso: autogestión productiva y encuentro cultural en Tolosa - Política y Medios
19-04-2024 - Edición Nº5922

ENTREVISTA

Se viene el primer Festival Multiverso: autogestión productiva y encuentro cultural en Tolosa

El evento se realizará el Centro Cultural de calle 3 y 526, donde se espera una gran convocatoria. Dialogamos con Ciro Pujol, uno de los organizadores, sobre cómo surge, desde dónde se concibe y hacia dónde apunta.

Este sábado desde las 14 horas estará dando sus primeros pasos en Tolosa el Festival Multiverso, un evento interdisciplinario que reúne propuestas musicales, literarias, emprendimientos productivos, gastronómicos y a una gran cantidad de personas buscando mostrar su trabajo.

Organizado por la Comunidad Ferroviaria de la localidad de la zona norte de la capital bonaerense, se prevé que será un espacio de encuentro con gran potencial para artistas, emprendedores, vecinos y vecinas; y todo aquel que desee acercarse a pasar una gran tarde.

Desde PolíticaYMedios entrevistamos a Ciro Pujol, uno de los integrantes de la organización, para conocer en profundidad los orígenes de la comunidad, el marco en el cual surge el evento, los objetivos y las proyecciones. 

[Entrevista a Ciro Pujol]

-¿Cómo surge el grupo de trabajo que organizó el festival?

-La Comunidad Ferroviaria es un polo productivo, por un lado. Funciona en diversos rubros productivos como carpintería, herrería, textil, serigrafía; hay una cocina también que funciona para todos los eventos que suceden acá. Hay una radio, un espacio de permeabilidad educativa, un FINES. Esa es un poco la comunidad que trabaja en el espacio, y lo que se empezó a trabajar desde hace un tiempo es la cuestión cultural.

Lo que sucede con los eventos que hemos producido, que son de diverso tipo, es que invitan oa cercan a la gente a nuestra comunidad, a nuestro galpón. Genera la posibilidad de enlazar todos los proyectos que suceden con la comunidad.

Si bien ha habido cursos de formación en oficios, está la Radio Trinchera en los galpones, con lo cual la gente transita constantemente, el momento de los eventos es como el espacio donde la gente se encuentra con todos estos productivos y esta comunidad que sucede. Y entonces es un poco desde ahí que viene la proyección del festival; porque realmente tiene un poquito de cada uno de los integrantes del espacio. Cada uno aporta su parte tanto material como intelectual, y es un poco de ahí que nace el proyecto de multiverso.

-¿La Comunidad tiene una trayectoria de años trabajando en este sentido?

-Sí, acá en los galpones han llegado desde el 2007 compañeres de ADDHES (Autoconvocados en Defensa de los Derechos Humanos de los Enfermos de Sida). A estos estos galpones que estaban abandonadísimos, con árboles adentro; y a fuerza de mucho trabajo, de lucha, han podido techarlo, hacer el contrapiso, levantar paredes que faltaban, montar el textil, el taller de serigrafía. Y desde ese año que viene construyéndose este polo diverso.

Tuvo su recaída, sobre todo durante el macrismo. Porque se trabaja mucho con el textil y cuando las importaciones se abrieron no tuvo la capacidad para competir, porque no la tiene nadie para competir con los productos de China, Taiwan, Indonesia.

Entonces fue un golpazo donde el espacio se empezó a cerrar un poco y a partir de hace más o menos 3 o 4 años empezó a resurgir. Con la pandemia nos tocó quedarnos adentro pero podíamos venir a trabajar. Fue como trabajar para salir y ahora estamos volviendo a la cancha, al ruedo; y este evento es como mostrarnos de vuelta en el juego.

-Ese podría ser uno de los objetivos, digamos. A eso venía la pregunta siguiente: ¿con qué objetivos o con qué norte se pensó y se llevó adelante este proyecto? Teniendo en cuenta que se publicita como “el primer” Festival Multiverso.

-Nosotros tenemos una concepción en relación a la cultura. Creemos que es muy importante sobre todo como espacio de encuentro, de un montón de expresiones artísticas, pero también de la gente. Y este festival lo que hace es encontrar varias propuestas de distinto tipo en un solo espacio. No queríamos adoptar la construcción de un festival destinado al rock o a tal cosa. Un encuentro de un montón de propuestas, que también tienen que ver con lo que hemos hecho nosotros acá a lo largo de tanto tiempo.

También es la idea que artistas platenses, grupos o personas que quieran expresarse puedan tener un espacio. Nosotros hemos hecho varios eventos y la gente empezó a escribirnos diciendo que querían participar, preguntando si podían venir. Y nosotres queremos tratar de que sea el espacio donde puedan venir a expresarse o presentar sus proyectos. Un poco también es ese el sentido.

-Volviendo a retomar este concepto del ‘Primer’ Festival Multiverso: ¿hay una idea de trasfondo de poder repetir el evento con cierta periodicidad?

-Sí claro. Hay una proyección clara de volver a hacerlo. No creo que con mucha periodicidad, no creo que vuelva a suceder este año. Pero anualmente seguro.

Ahora por delante tenemos varios eventos, además de Multiverso, trabajados con otros grupos. Pero la idea es dejar sentado el proyecto para continuar trabajando con las propuestas que nos traen. Porque cada artista que viene trae su propuesta, desde distintos palos, y nosotros vamos encontrando el enganche entre una propuesta y la otra.

Así que sí, proyectamos a que suceda este, pero también reinventarnos, aprender del Festival que va a suceder y proyectar nuevamente.

-¿Ayuda también en una ciudad tan activa culturalmente que haya tantos artistas con expresiones que necesitan un canal donde aparecer?

-Si, ni hablar. De hecho durante la pandemia, y desde hace un tiempo, los espacios culturales están siendo un poco castigados en La Plata. De hecho la pandemia lo agudizó y muchos espacios terminaron desapareciendo directamente.

Entonces es como esta revuelta de muchos grupos que quieren presentarse y no hay tantos circuitos como supo haber en otro momento. Por suerte se están reconstruyendo y eso lo estamos viendo también.

Pero bueno, no sólo con el ataque constante que reciben por parte del municipio con las clausuras y el no acompañamiento, sino también con la pandemia; que fueron dos cachetazos que dejaron la escena muy frenada. Por suerte se está reinventando y con eso estamos muy contentos, pero tiene eso. Vienen muchos artistas con la necesidad de poder presentarse, hacer algo, moverse. La mayoría de los grupos que se han presentado están muy contentos de poder estar en un festival, con gente, hay muchas ganas ahí.

-Me comentabas que el espacio desde su constitución tiene ya muchos años, y te quería consultar por la relación que tienen con la comunidad más inmediata geográficamente: ¿hay una relación con el barrio, son reconocidos como espacio, se acerca el vecino?

-Hace un tiempito, a través sobre todo de los eventos culturales, hemos generado ese vínculo con el barrio. Siempre que nosotres hacemos un evento tratamos de salir primero por el barrio a repartir volantes, pegar afiches. Y hemos hecho desde un carnaval hasta un bingo un domingo por la tarde, entonces la gente del barrio también se ha arrimado a participar.

Lo que tiene de bueno este espacio, que nosotros compartimos con el Ferroclub, que está lindante a nuestro galpón y con el Club de Fútbol Vradi. Entonces nosotros compartimos como todo un predio en donde la gente ya tiene participación y por suerte hemos tenido gran aceptación. La gente ha venido desde el barrio, distintos puntos de Tolosa, y se encuentra jugando a la pelota acá, viniendo a andar en bicicleta o pintando una pared en un lugar que estaba derrumbado o caído, y realmente se llevan una sorpresa cuando se encuentran el movimiento y la vida que tiene continuamente el espacio hoy. Así que en ese sentido la gente está contenta también y se anima a participar.

-De cara al evento, ¿cuál es la expectativa en cuanto a la afluencia de gente, tienen una idea aproximada?

-La verdad es que no tenemos tan concretamente, porque es una entrada que está a precio popular, así que no hay gran desesperación para adquirir la preventa. Si costara 5 mil pesos la gente por ahí se apura a comprar la preventa porque por ahí en la puerta te sale 8. Pero como cuesta 1.200 pesos con una consumición, para estudiantes y jubilados cuesta menos, se entiende por ahí que en la puerta no va a valer 3 mil pesos.

Entonces no hay una desesperación. Sí proyectamos unas mil y pico de personas, como ya hemos tenido en otros eventos que hemos hecho acá. Después es una cuestión de esperar, no tenemos tan en claro los números.

-Según los flyers publicitarios las entradas pueden adquirirse en diferentes facultades de la ciudad, ¿esto tiene que ver con apuntar a un público puntual o es porque el grupo tiene presencia en las diferentes casas de estudio y de paso el grupo aprovecha a difundir por esos espacios?

-Es un poco de las dos cosas, porque como el festival no tiene una sola identidad, no tiene un solo público. Nosotres no trabajamos la convocatoria pensando en un público porque la diversidad de expresiones tanto arriba del escenario como por debajo es para una diversidad de público.

Entonces sí apuntamos a que les estudiantes puedan participar, no es el único público al que apuntamos pero nos parece fundamental que participen porque acá funcionan un montón de proyectos. A veces muchas personas vienen a los festivales y por ahí se quedan enganchados en alguno de los proyectos, entonces viene un poco por ahí la mano y aprovechamos que tenemos presencia en las facultades para poder difundirlo.

-¿Articulan con alguna organización que hace posible la proyección tanto de la Comunidad como del Festival?

-Acá trabajamos con ADDHES, que es una organización central en este espacio, y la Corriente Nuestra Patria; que son las dos organizaciones que sostienen y construyen en este espacio.

Pero también se da la particularidad de que hay un montón de personas quizás no agrupadas. Hay un encuentro, y para nosotros la cuestión de la cultura va un poquito más allá... Pero sí hay un gran empuje y muchas de las cosas son posibles por lo que generan la Corriente Nuestra Patria y ADDHES en este espacio. Porque si no hay organización sostener eventos de este tipo es muy difícil, uno está en el día a día y sin una estructura de orden y de comunidad colectiva es imposible.

Pero sin embargo también hay un montón de otras personas y espacios que participan al margen de la organización; que eso es lo interesante. Nosotros nos abrimos como espacio y organización a participar con un montón de otros actores que no vienen directamente de nuestra línea y eso es lo rico que se da en estas construcciones como el festival.

-¿Te gustaría agregar algo más o poner alguna información de relieve?

-Sí, me gustaría contar que las entradas se pueden adquirir de manera virtual por Alpogo, también en la cervecería Walden (19 y 55), en Martina (51 y 23) y Las Artes (7, 58 y 59). Y nada, invitarles a que vengan.

Siempre decimos que no invitamos para que vengan a apoyar el espacio, sino porque acá suceden cosas lindas. Después aportan al espacio como si fuese un efecto de venir a disfrutar.

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