ENTRETELONES DE CASA ROSADA
La situación en la localidad de Berisso es cada vez más preocupante: en cada entrevista que concede, es el mismo intendente Fabián Cagliardi quien cuenta que en la ciudad resta una enorme lista de probemáticas por resolver y que, en estos años de pandemia, la prioridad estuvo puesta en las inversiones para el área de la salud.
En este marco, aunque el jefe comunal adelantó que “durante el 2022 habrá obras importantes para la ciudad” y mencionó las licitaciones que se han dado en la provincia de Buenos Aires, la oposición utilizó las redes sociales para dar una visión distinta de que ocurre en la ciudad, criticando al intendente por la falta de luz, la falta de agua y las problemáticas sociales que afectan la vida de los vecinos día a día.
Sin embargo, ediles del oficialismo como Gabriel Marotte, salieron a responder a esos cuestionamientos diciendo que la oposición hace "politiquería barata” por las redes sociales, en vez de "salir a la calle y ayudar a los vecinos".
Lo cierto y, que nadie cuenta, es que el mismo intendente se reunió con los funcionarios de la Provincia con el objetivo de avanzar en una serie de demandas y denuncias con las prestadoras de servicio para que mejoren el servicio de luz y agua en la capital provincial del inmigrante, sabiendo que, entre las complicaciones que trae aparejada la pandemia y la ola de calor que hubo días atrás, no es recomendable habitar uuna casa con baja presión o sin luz.
Sin embargo, la oposición vuelvió a utilizar el Facebook para dar por sentado un posicionamiento: atacar al intendente. En las respectivas redes sociales, los ediles mostraron una reunión con la Defensoría de la Provincia de Buenos Aires: misma reunión que tuvo el oficialismo y misma reunión en la que en un momento, participó el intendente.
En aquel encuentro entre Juntos y Guido Lorenzino, los concejales resaltaron que “pusimos sobre la mesa las problemáticas que existen con EDELAP y ABSA y nos reunimos con el Defensor del Pueblo de la Provincia, para comenzar un seguimiento y pedirle a las empresas que inviertan lo que hay que invertir”.
“Además, le insistimos a la Defensoría que inste a dichas empresas a comprometerse y llevar adelante de manera urgente acciones en nuestra ciudad, a fin de lograr medidas en lo inmediato que permitan paliar esta situación”, explicaron.
Pero lo preocupante no son las acciones -que llevarán un proceso largo para que haya una resolución y, con ello, podría haber llegado ya el invierno esperando la respuesta- sino que se vivió una semana donde las protagonistas fueron las acusaciones cruzadas en las redes sociales en lugar de las acciones concretas como repartir bidones, ver la situación en los centros de testeo o acompañar al personal de salud.
No obstante, en las ultimas horas quien bajó el tono la discusión y apuntó contra todos fue un funcionario mano derecha de Cagliardi, Martín Fernández, quien a través de Facebook expuso la realidad que se vive por estas horas: “Hace tiempo leo insultos, mentiras y denostaciones, pero duele más cuando se habla sin saber, cuando se inventa tanto, cuando denigran a algunos compañeros y compañeras desde un sillón”, escribió.
Así, continuó: "Se trabaja todos los días y todas las horas para solucionar las demandas urgentes que durante mucho tiempo fueron olvidadas, se trabaja también proyectando a mediano plazo y largo plazo porque nada es de un día para otro. Con o sin recursos se debe proyectar"
En esa línea, completó: “Trabajamos todas nuestras horas del día, mis compañeros y yo, pero más aún Fabián, el intendente, quien pasa más horas que nosotros abocado a que Berisso crezca de una buena vez y lograr una ciudad para todos, bonita y que nos vuelva a enorgullecer y a enamorar”.
Por lo pronto, las redes sociales después de ese posteo, se hicieron al silencio y, la política en Berisso volvió a las sombras. ¿Qué ocurrirá el fin de semana?
