El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a ser noticia por una escandalosa iniciativa dirigida a modificar un sensible contenido educativo, en consonancia con su postura negacionista de la dictadura militar.
Según trascendió en las últimas horas, el mandatario le solicitó al Ministro de Educación, Milton Ribeiro, cambiar el rótulo del golpe de Estado militar perpetrado en 1964 por el concepto de “revolución”. La propuesta se da en la víspera del Examen Nacional de Enseñanza Media (ENEM), que tendrá lugar este fin de semana.
Si bien esta intención no llegó a formalizarse, funcionarios del Ministerio de Educación y trabajadores del Instituto Nacional de Estudios e Investigaciones Educativas (INEP) sí denunciaron que Ribeiro planteó el pedido del presidente y presionó para que fuera considerado.
Como consecuencia, numerosos funcionarios del INEP presentaron su renuncia durante la semana pasada ante la avanzada del discurso negacionista presidencial sobre la configuración de los contenidos educativos.
Al igual que ocurre en nuestro país con referentes de la extrema derecha, Bolsonaro suele acusar al personal del organismo de izquierdista por no concordar con sus ideas conservadoras radicales.
CENSURA NO ENEM | De Laerte a Ferreira Gullar, de Chico Buarque a Madonna – o que diziam as questões que o governo Bolsonaro censurou em 2019 no Exame Nacional do Ensino Médio. Leia na @revistapiaui https://t.co/oNoN7CStek pic.twitter.com/e6RDgFzVoI
— Folha de S.Paulo (@folha) November 18, 2021
“Ahora las preguntas de la prueba del ENEM comienzan a tener la cara del Gobierno. Que nadie se preocupe por aquellas cuestiones absurdas del pasado, asuntos de redacción que no tenían nada que ver con nada”, señaló al respecto el presidente al ser consultado por las críticas.
En esa línea, desde Dubai, contó: “Conversé rápidamente con Milton, que es una persona seria, responsable, es del sector. Me mandó un mensaje diciendo que la prueba del ENEM se va a realizar en la más absoluta tranquilidad”.
No obstante, no se trata del primer intento de reescribir la historia bajo una “interpretación” diferente de los hechos por parte de este gobierno. Según reportan desde Brasil, desde la llegada de Bolsonaro al Palacio del Planalto (enero de 2019) los contenidos vinculados a la dictadura de 1964 han ido desapareciendo.
Desde entonces, el Ejecutivo se ha ocupado de presionar para retirar de la prueba algunos temas que tanto el presidente como sus aliados más conservadores en el Congreso consideran inadecuados, sobre entre los cuales también se puede incluir el racismo, o cuestiones de género.
No obstante, técnicos del INEP aclararon que sería imposible acceder ni contemplar las demandas de Bolsonaro de modificar el concepto de golpe militar por revolución. Según apuntan, no solo porque las preguntas pasan primero por numerosos filtros, sino porque además carece de cualquier amparo histórico.