Este jueves 7 de mayo María Eva Duarte de Perón, conocida popularmente como "Evita", cumpliría 101 años. Es una fecha especial para millones de argentinos y argentinas, sobre todo para muchas mujeres y para el denomidado movimiento nacional y popular. A raíz de la cuarentena decretada por el Gobierno, Evita será recordada a través de las redes sociales.
Eva Perón nació el 7 de mayo de 1919 en Los Toldos, provincia de Buenos Aires. Era hija del estanciero Juan Duarte y Juana Ibarguren.
Como su padre falleció cuando ella era pequeña, la familia se trasladó a Junín y ella a los 16 años emigró a Buenos Aires.
Llevó a cabo una actividad artística y debutó en teatro en 1935 con “La señora de los Pérez” y en el cine, tres años más tarde, con “Segundos afuera”. Además tuvo repercusiones en la radio, desde el radioteatro.
El 22 de enero de 1944 en un acto por las víctimas del terremoto de San Juan, se cree que conoció al entonces coronel Juan Domingo Perón.
En los sucesos del 17 de octubre de 1945, que permitieron el regreso de Perón y su acceso a la presidencia, ella tuvo un rol fundamental. Ese mismo año, el 10 de diciembre, se casó con Perón por iglesia en La Plata.
El 6 de junio de 1947 arrancó su gira por Europa que abarcó España, Francia, Suiza e Italia. En aquel momento fue denominada "Gira del Arco Iris". Gracias a que Eva fue la impulsora, el 23 de septiembre de ese año se promulgó la Ley del Voto Femenino.
En julio de 1948 surgió la Fundación Eva Perón, que reúne la actividad solidaria que promovía la esposa del Presidente.
En agosto de 1951, debido a su salud deteriorada y presiones de distintos sectores, Evita no aceptó integrar la fórmula presidencial con Perón. Luego del “Cabildo abierto”, escribió su carta de renuncia a la candidatura. El 11 de noviembre de ese año, ya muy enferma, votó desde su cama del Policlínico de Avellaneda.
Fue el 1 de mayo de 1952 cuando pronunció su último discurso. El 4 de junio, con un corset de alambre y yeso, acompañó en el auto a que Perón asumiera su segundo mandato.
El 26 de julio de 1952 fue el día en que quedó sin vida en Buenos Aires, provocando el llanto y la angustia de millones de argentinos. Argentina se vistió de luto y miles de personas asistieron a su funeral, tantas que la cola para despedir a Evita llegó a medir 35 cuadras. Su velorio duró 14 días y los 'descamisados', como le decía de cariño a los más humildes, se sintieron huérfanos con su partida