
En medio de una denuncia por persecución judicial, decenas de argentinos se juntaron este lunes en las puertas de la sede de Madres de Plaza de Mayo, luego de que la histórica organización recibiera una notificación de allanamiento para un proceso judicial.
El organismo de Derechos Humanos, liderado por Hebe de Bonafini, advirtió en un comunicado que, disfrazado de un procedimiento que para hacer un inventario de bienes para saldar deudas económicas, lo que realmente busca el allanamiento es confiscar el archivo histórico de la agrupación.
En es sentido, las Madres señalaron que el juez Fernando Perillo ordenó el allanamiento para el que habilitó la actuación de fuerzas policiales.
El operativo, añadieron, obedece a una presentación del juez Javier Buján, designado rector interventor por el Ministerio de Justicia, quien reclama el archivo histórico de las Madres para su ilegal confiscación, denunciaron.
En este marco, colectivos de Derechos Humanos con banderas y consignas, se sumaron a un abrazo solidario en las puertas de la casa de las Madres, a pocos metros del Congreso.
'Ante una nueva embestida que pretende apropiarse del archivo histórico, borrar la memoria del pueblo, de las Madres de Plaza de Mayo y de 30 mil compañeras y compañeros, convocamos a proteger un espacio que es de y para todos', precisaron desde Madres.
Asimismo, agregaron que el archivo “pertenece al pueblo”. “Casi 42 años de lucha y resistencia para construir la memoria colectiva. Un eco de conciencia, un triunfo de la memoria. Esto es lo que el gobierno se quiere apropiar”, remarcaron.