Desde la empresa aducen una crisis terminal y se mantienen inflexibles en cuanto a la intención de cerrar definitivamente la planta ubicada en Lanús. Los trabajadores niegan la supuesta crisis de una empresa que "ha facturado más de 34 mil millones de dólares a nivel global", reveló Ezequiel Roldán, del Sindicato de Aceiteros, en diálogo con el canal C5N.
Por otra parte, Roldán denunció que "hubo una CGT ausente durante el conflicto" y agregó que "estamos pidiendo una renovación de las autoridades, que luchen contra los despidos y la crisis" pero que "de la conducción de la CGT no hemos recibido ninguna noticia positiva".
El lunes 25 se realizará una nueva audiencia entre las partes. Casi con seguridad, los empresarios insistirán con la idea de cerrar definitivamente la planta y el Ministerio de Trabajo se ha mostrado incapaz de presentar una propuesta positiva para los trabajadores, que advirtieron con medidas de fuerza nacionales si el conflicto termina con el cierre de la fábrica.