Tras una nueva serie de despidos en el Hospital Posadas, profesionales de la salud, enfermeras, pacientes, residentes y vecinos de Morón realizaron una "marcha del silencio" en la rotonda que se encuentra frente al establecimiento en contra del ajuste en la salud pública. En lo que va del año despidieron a 300 trabajadores y, en las últimas dos semanas, llegaron unos cuarenta telegramas de despido.
Los primeros despidos fueron en enero, cuando 120 personas se vieron desafectadas del Hospital producto de un recorte propuesto por el Ministerio de Modernización, hoy disuelto y bajo la órbita de la Jefatura de Gabinete de la Nación. Entre esos primeros despidos, muchas fueron enfermeras que se negaron a la extensión de la jornada laboral a 10 horas. Algunas de ellas embarazadas.
El miércoles 12 de septiembre, los trabajadores del Posadas denunciaron nuevos despidos, que podrían llegar a los 80. "Ellos dicen que el Hospital puede funcionar con dos mil trabajadores, la mitad de la planta que tiene ahora", señaló en conversación con Política&Medios Jorge Yabkowski, presidente de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA).
Estas sucesivas tandas de despidos se trasladan inmediatamente al deterioro asistencial de uno de los hospitales modelo de la provincia de Buenos Aires. Hasta el momento se vieron perjudicadas las áreas de cirgugía infantil, cardiología, salud mental y las guardias. Además, desarmaron el equipo para atención de fibrosis quística y habrá postergaciones en las operaciones de neurocirugía y de columna.
En medio de esta crisis renunció, días atrás, uno de los directivos del Hospital ubicado en Morón luego de que le presentaran una lista de 300 trabajadores para continuar con los despidos. En este contexto, el Hospital se encuentra custodiado por cuatro fuerzas de seguridad desde hace un año y medio: Policía Federal, Bonaerense, Gendarmería y Seguridad Privada. En una ocasión, pacientes de cardiología quisieron hablar con la dirección del establecimiento para plantear reclamos y fueron frenados por Gendarmería.
Para Yabkowsky, el objetivo del ajuste en salud es "desactivar al Estado como prestador y garante de los servicios de salud y que sólo tenga un rol de simple gestor de políticas asistencialistas". "El Estado debe desaparecer como productor de bienes materiales o de bienes de servicio y ser sólo financiador del sector privado", explicó el titular de FESPROSA sobre los objetivos del gobierno detrás de este brutal ajuste.
Por último, para la semana que viene se prevé un paro de actividades en el Hospital, al que podrían sumarse medidas de fuerza de gremios provinciales y nacionales.