En el Consejo Escolar de La Plata algo no anda bien. Tras la renuncia de Pablo Bolino al frente del cuerpo a comienzos de 2018, se sumó ayer la dimisión presentada por la tesorera Sandra Rodríguez.
Aunque no renunciaría como Consejera, Rodríguez denunció en el escrito presentado graves denuncias sobre irregularidades en la administración del Consejo Escolar, fundamentalmente en el área de Infraestructura. “No se da cumplimiento efectivo a los pasos previos para la contratación de proveedores”, disparó.
Además de revelar que los fondos se asignan de forma deliberada y sin consulta a la comisión de Infraestructura, Rodríguez sostuvo en la presentación de su renuncia que no se cumplen “las normativas vigentes” con respecto a los fondos que deberían estar destinados a la realización de trabajos de infraestructura en las escuelas plantenses.
Una semana atrás, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Provincia de Buenos Aires junto a otros gremios, directivos escolares, padres y madres de alumnos reclamaron a la Comisión de Infraestructura, presidida por Rodríguez, la realización de obras edilicias y apuntaron a la saliente tesorera como la responsable.