
La Asociación de Trabajadores del Estado de Ensenada denunció que las nuevas autoridades del Astillero Río Santiago persiguen al sindicato y a los delegados gremiales. La situación se da luego de la asunción de Daniel Capdevila al frente del Astillero el pasado 7 de mayo, a través de un decreto de María Eugenia Vidal.
Vale recordar que, una vez asumidas las nuevas autoridades, se despidieron a siete gerentes de carrera de la empresa, lo que provocó la preocupación de los trabajadores. A esto se le suma lo que el secretario general de ATE Ensenada, Francisco Banegas, denominó como "el ahogamiento financiero que el gobierno bonaerense realiza en el Astillero" mediante la "paralización de trabajos y contratos de construcciones de la empresa".
El planteo de persecución gremial se basa en denuncias de "automóviles que pasan sospechosamente por la puerta del gremio y toman fotografías", señalaron desde ATE y añadieron que "en la empresa hay un maltrato manifiesto con los trabajadores".
"Se han quitado horas de insalubridad y jornada reducida de ciertos sectores de la empresa, se quiere reducir el ausentismo de enfermedades prolongadas no avalando los certificados médicos y hay presión para intimidar y generar temor entre los trabajadores" explicaron.
Según Banegas, el gobierno de Vidal debería haber convocado ayer a la mesa paritaria y no lo hizo. Por lo tanto, explicó que "los trabajadores estamos más unidos que nunca y el día lunes vamos a realizar una reunión con el cuerpo de delegados y el martes vamos a estar con asambleas para movilizar en la semana".