
En medio de una ola de despidos, tanto en el sector público como en el privado, que la alianza Cambienos niega, esta rama de la economía se encuentra aún en una situación más complicada. “Por cada trabajador formal que se queda sin laburo, aproximadamente casi que se pierden 4 puestos de la informalidad” explica Onorato; es decir que un empleado produce un efecto de “derrame”, contratando a trabajadores de la economía popular para lo que comúnmente se denominan “changas”. Ese efecto se “viene perdiendo, y sin reparo del Estado es muy difícil reconstruirlo. Estamos muy preocupados por esa situación pero dando la pelea” señala el diregente de la CTEP.
P&M: ¿Cómo están viviendo los trabajadores de la economía popular este momento?
Es una situación que, en líneas en generales, le está sucediendo al conjunto de los trabajadores pero con una dificultad un tanto mayor. Los trabajadores de la economía popular la pelea que estábamos dando era por salir de la informalidad, por conquistar los derechos, por acercarnos a los derechos que tiene un trabajador registrado. Hoy en día vemos que eso se va complicando cada vez más; no estamos pudiendo pensar tanto hacia adelante, sino que tenemos que pensar nuevamente en pagar la olla, en ver de qué manera los pibes van al colegio, estamos volviendo a una situación en la que se han acrecentado los comedores populares y en los merenderos.
P&M:¿Cómo se están organizando ante esta situación?
En principio fortaleciendo nuestras demandas, acercándonos cada día más al conjunto de la clase trabajadora. Por eso celebramos con mucha alegría lo del 29 de abril. http://www.politicaymedios.com.ar/nota/8566/acto_en_defensa_del_trabajo/
Después insistiendo en el desarrollo del Registro de los Trabajadores de la Economía Popular que estamos construyendo para lograr un suplemento salarial; el compañero que changuea se gana un mango con su changa pero tiene que existir también el complemento salarial que no puede ser menor a los 4000 o 4500 que percibimos en algunos casos por programas sociales.
Entendemos que conjuntamente con la clase trabajadora, organizadas en las Centrales, vamos construyendo una agenda, que por más que el gobierno nos hable de la felicidad o que la justicia y los medios nos encandilen con estos operativos, estos allanamientos fabulosos, que parecen salir de la Fox News, de los canales de noticia norteamericanos, nosotros de a poco vamos metiendo la verdadera agenda que es las que sufren los laburantes de la Argentina.
P&M: Uno de los sectores de la economía popular son los manteros
Los compañeros tienen que conseguir su mercadería muchas veces en situaciones de injusticia, tiene que intentar venderla lidiando con la persecución de las mafias y con la corrupción de las fuerzas de seguridad.
No son considerados trabajadores, cuando en realidad lo que busca alguien cuando tira una manta en la calle, para vender su arte, su producción textil, sus manualidades, es llevar un plato de comida a la casa. El pintor y el plomero, que nos hacen un laburo en nuestra casa, como el mantero lo que están haciendo es inventarse su trabajo. La economía popular tiene mucho de supervivencia y si el Estado no repara: si el Estado no ayuda, esos compañeros van siendo empujados a la exclusión.
Se discute mucho en los medios y en la política, la superestructura como le decimos, acerca del mercado, de la economía, del rol de estado. Nos parece que está clara la respuesta; cuando el estado se retira de la economía ganan los grandes grupos económicos
Cuando el Estado se retira del barrio pierden mucho los compañeros; se desespera la familia, está la dificultad del que se queda en la casa porque no consigue laburo, se deprime, la familia empieza a tener dificultades. Nos hacemos eco de las palabras del Papa Francisco nosotros, no solamente "Tierra, Techo y Trabajo" sino que tenemos que cuidar a nuestros viejos, formar a nuestros pibes, defender y organizar para que los compañeros trabajadores y trabajadoras tengan cada día más derechos y nos parece que la CTEP está en esa dirección y nosotros no vamos a bajar los brazos por más que nos quieran imponer un modelo que nos lleve al fatalismo.
P&M: Ante esta situación ¿Cómo crees que va a seguir lo que resta de la gestión macrista para los trabajadores?
Nosotros le damos una enorme importancia a lo que sucedió el 29 de abril, porque independientemente de la filiación política de la dirigencia o el rol particular de los dirigentes que convocaron, la movilización la hicieron los trabajadores: los que durante meses estuvieron construyendo las tomas de los espacios de trabajo, los cortes de ruta, las movilizaciones para discutir el empleo; esos compañeros construyeron el 29 de abril y están de alguna manera dándole una señal a la dirigencia política.
Cualquier dirigente político que quiera expresar una alternativa popular, transformadora, con la agenda de los pueblos más humildes, no puede obviar esa movilización y esa agenda. Por lo tanto nosotros saludamos y celebramos que el camino de la oposición tiene que ser constructivo e institucional pero haciendo eje sobre todo en la agenda del pueblo.
P&M: Van más de tres meses que Milagro Sala está detenida con una causa armada, desde el gobierno y de un poder judicial con una clara intencionalidad política. A esto se le suma la detención de trabajadores de la economía popular de Salta con causas también armadas ¿Cómo trabaja la CTEP para pelear con un poder judicial tan instaurado en Argentina que el primer golpe que tuvo fue contra la dirigente de la TUPAC?
Nos parece que el refugio que tienen los humildes es la organización colectiva y solidaria. Efectivamente hay sectores del poder que quieren destruir eso, porque en el germen de la organización popular está la posibilidad de tener una vida más digna y una sociedad más justa.
Hay una estigmatización de los movimientos populares. Lo ha planteado la iglesia a través de monseñor lozano. Nos parece que el refugio que tienen los humildes es la organización colectiva y solidaria. Efectivamente hay sectores del poder que quieren destruir eso porque en el germen de la organización popular está la posibilidad de tener una vida más digna y una sociedad más.
No nos parece algo al boleo, sino que hay una política al respecto. Existe una estigmatización y una política para aislar y para excluir y eso tiene dos orígenes. Uno en el poder económico que sabe que los trabajadores son su freno para saciar su lógica de concentración y otro es el poder judicial que está avanzando drásticamente con una agenda que intenta condicionar al conjunto de la institucionalidad argentina haciendo día a día más débil al poder político.
Eso es una estrategia de los poderes permanentes, porque ni el poder judicial, ni el poder económico se revalidan con elecciones cada dos años como hace la dirigencia política y como nos sometemos todos al voto popular. Eso tiene un objetivo claro que es que gobiernen los poderes permanentes, independientemente de lo que el pueblo elija.
En ese sentido, creemos que el gran protagonismo de los trabajadores, de los sectores populares, es lo que puede poner un freno. Cuando echan a un compañero independientemente del sector político de donde provenga o el compañero que cobra 4 mil pesos sea del sector que sea, no puede dejar de reconocerse como un compañero que sufre y que tiene que pagar la olla en la casa. Si entendemos esa solidaridad, es más fácil construir la unidad para formar una alternativa.