Horas atrás, Donald Trump anunció un bloqueo naval a Venezuela que empeora las hostilidades en el continente. “Hoy ordeno un bloqueo total y completo de todos los petroleros sancionados que entren y salgan de Venezuela”, escribió el presidente estadounidense en su plataforma Truth Social, pocos días después de que fuerzas de su país incautaran un petrolero frente a la costa venezolana.
El mandatario agregó que la flota estadounidense concentrada en el Caribe “seguirá creciendo” hasta que el Gobierno de Nicolás Maduro devuelva “a los Estados Unidos de América todo el petróleo, la tierra y otros activos que anteriormente nos robaron”. No especificó a qué petróleo o tierras se refería ni a por qué serían de Estados Unidos, pero Venezuela en la década de 1970 nacionalizó su industria petrolera. Más tarde, durante el Gobierno de Hugo Chávez, las empresas se vieron obligadas a ceder el control mayoritario a la petrolera estatal venezolana, PDVSA.
Además, Trump denunció que "el régimen ilegítimo de Maduro está usando el petróleo de yacimientos robados para financiarse a sí mismo, al narcoterrorismo, al tráfico de personas, el asesinato y el secuestro. Por el robo de nuestros activos, y por muchas otras razones, incluyendo el terrorismo, el narcotráfico y la trata de personas, el régimen venezolano ha sido designado como una organización terrorista extranjera".
Trump cerró su mensaje con una advertencia: "Los inmigrantes ilegales y criminales que el régimen de Maduro envió a Estados Unidos durante la débil e inepta Administración Biden volverán a Venezuela. Estados Unidos no permitirá que criminales, terroristas ni otros países roben, amenacen o dañen a nuestra nación ni permitirá que un régimen hostil se apodere de nuestro petróleo, nuestras tierras ni ningún otro activo, todo lo cual debe ser devuelto a Estados Unidos de manera inmediata”.
El Gobierno venezolano definió como “grotesca amenaza” el bloqueo anunciado por Trump. En un comunicado, explicó: “El presidente de los Estados Unidos pretende imponer de manera absolutamente irracional un supuesto bloqueo militar naval a Venezuela con el objetivo de robarse las riquezas que pertenecen a nuestra Patria”.
El pasado 10 de diciembre, Washington decomisó un buque cisterna sancionado por el Departamento del Tesoro que acababa de salir de Venezuela lleno de petróleo, quedándose con la nave y con el crudo. El Gobierno de Maduro definió lo ocurrido como un “robo descarado”. De acuerdo a la versión de Estados Unidos, el buque decomisado estaba relacionado con Irán y Hezbolá.
En paralelo a estas medidas, Trump anunció sanciones contra seis empresas dedicadas al transporte de crudo y seis buques cisterna. Francisco Monaldi, director del Programa de Energía de América Latina del Instituto Baker (Texas), declaró a la agencia AFP que esta decisión representa “un escalamiento muy significativo”.
El experto detalló que los seis buques se encontraban en puertos venezolanos cuando se difundió la medida, y explicó que “están esperando a que [cada buque] salga del país para detenerlo. Eso, combinado con que quizás algunos barcos literalmente dicen 'no vuelvo a Venezuela', pueden llevar a que haya una caída tanto del precio como del volumen exportado. Si además cae la exportación, el problema que tiene Venezuela es que no tiene mucha capacidad de almacenar crudo. Entonces, tiene que parar la producción o cerrar cierta parte de la producción”.
Al encontrarse aislado internacionalmente, Maduro debe usar los buques que cargan crudo en Venezuela a un valor muy inferior al del mercado para luego venderlo esquivando las sanciones financieras que tiene en su contra. En la actualidad, Caracas produce aproximadamente 930.000 barriles diarios y la mayoría van a China.
Estados Unidos cuenta con una gran flotilla desplegada en el Caribe y el Pacífico, encabezada por su portaaviones “USS Gerald Ford”, el mayor del mundo, que le permitiría bloquear, el tiempo que quiera, los puertos al tráfico petrolero, lo que crearía graves problemas al Gobierno chavista. "Si no hay exportaciones de petróleo, se afectará el mercado cambiario, las importaciones del país... Podría haber una crisis económica", explicó a la AFP Elías Ferrer, de Orinoco Research, una consultora venezolana. "No sólo una recesión, sino también escasez de alimentos y medicinas, porque no podríamos importar".
Hasta ahora, el ejército estadounidense sólo ha atacado barcos en aguas internacionales que, según afirma, trafican drogas, matando al menos a 95 personas, en lo que muchos expertos consideran ejecuciones extrajudiciales. Pero las tensiones han ido aumentando durante semanas a medida que Trump adelanta su intención de lanzar una acción militar dentro de Venezuela, declarando ominosamente que el espacio aéreo del país debería considerarse "cerrado" y que los esfuerzos para detener el narcotráfico "en tierra" comenzarían pronto.