
El presidente de la Nación, Javier Milei, sumó una nueva denuncia en su contra lisa y llanamente por hablar de más. El abogado de la ex presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, radicó la presentación judicial luego de que el jefe de Estado asegurara en declaraciones públicas que él la mandó a la cárcel.
Pese a que la confianza en la independencia del Poder Judicial en nuestro país no goza de la mayor credibilidad, el sincericidio del mandatario libertario llamó poderosamente la atención, tanto en el intercambio televisivo como luego en el entorno de la ex mandataria.
"Le puedo asegurar que esto es la venganza de que soy el primer presidente que tomó la decisión de que vaya presa", expresó Milei a los gritos y con su habitual gesto vehemente, en diálogo con Luis Majul en La Nación+, uno de los espacios seguros para el oficialismo.
El titular del Ejecutivo Nacional se refería a las denuncias contra José Luis Espert por vínculos con el empresario narco Fred Machado, que precipitaron la renuncia a la candidatura encabezando la boleta de La Libertad Avanza en la Provincia de Buenos Aires, y su posterior renuncia a la presidencia de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados.
Milei acaba de admitir que si Cristina fue condenada, fue porque él quiso.
— fran ☀️ (@scfran27_) October 6, 2025
Dijo “soy el primer presidente que tomó la decisión de meter presa a Cristina”. En cualquier lado esto implicaría una destitución inmediata.
La vara institucional está por el piso. pic.twitter.com/kca4rLNWR7
Majul advirtió rápidamente el elefante en la habitación y trató de volver a encarrilar al presidente, más con una aseveración que con una pregunta: "Pero usted no se mete con la Justicia".
En ese momento le cayó la ficha al líder libertario, que buscó volver sobre sus pasos: "Ahí está el problema, yo no me meto con la Justicia. Digamos, o sea, le puedo asegurar que si yo hubiera sido sucio y me hubiera metido con la Justicia yo no estaría padeciendo esto".
La torpeza de Milei no hizo más que blanquear una situación que es un secreto a voces no sólo en la política, sino entre la ciudadanía en general: un Poder Judicial adicto al Gobierno de turno que camina para donde sopla el viento.
Fue así que, en medio de las repercusiones, este lunes Dalbón lo denunció por abuso de autoridad, alegando que las palabras del presidente configuran "un claro ejercicio abusivo del poder y una violación directa a la independencia del Poder Judicial".
El letrado manifestó que "la declaración denunciada traduce una manifestación de poder ilegítimo: la pretensión de decidir sobre la libertad de una persona, función exclusiva de los tribunales", y advirtió: "Constituye un indicio de intromisión funcional y presión institucional sobre el Poder Judicial".
A su vez, consideró que las declaraciones presidenciales "podrían constituir elemento suficiente para revisar la sentencia" de la causa Vialidad "por cuanto refuerzan la presunción de que dicha decisión se fundó en un proceso afectado por influencia manifiestamente ilegítima".
Además, pidió que se remita la denuncia a la comisión de juicio político para que se inicie un proceso contra el presidente.