
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aprovechó su presentación ante la Asamblea de la Organización de las Naciones Unidas para recordar al expresidente José Mujica y al Papa Francisco y destacar sus “valores humanitarios”.
El mandatario brasileño sostuvo que ambos líderes fueron “personalidades excepcionales” que representaban compromisos con la justicia social, la dignidad humana y la preservación del medio ambiente.
Lula expresó que si Mujica y Francisco estuvieran vivos, probablemente usarían ese mismo foro para alertar sobre el avance del autoritarismo, la degradación ambiental y la desigualdad. Además consideró que “quien se resigna, está derrotado” y que frente a “falsos profetas y oligarcas que explotan el miedo y comercian con el odio”, hay espacio para la acción y la resistencia.
Por otra parte, sostuvo que "hoy los ideales que inspiraron a los fundadores de la ONU están amenazados como nunca antes en toda su historia y el multilateralismo está frente a una nueva encrucijada", al considerar que "en pocas áreas el mundo ha retrocedido tanto como en el sistema multilateral de comercio".