
El consumo masivo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y el conurbano bonaerense sufrió en julio un desplome histórico, con una contracción acumulada del 11,7 % respecto al mismo mes del año anterior, según diversas fuentes que coinciden en una fuerte caída del gasto familiar.
Radiografía de una caída que no se detiene
Según datos de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), el Indicador de Consumo (IC) cayó un 5,6 % interanual en julio a nivel nacional. Sin embargo, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el derrumbe fue mucho más pronunciado, apuntalando una media ponderada de –11,7 % para CABA y GBA.
El acumulado de los primeros siete meses del año muestra una caída del 6,2 % en el IC nacional, pero la recuperación que se insinúa a nivel país todavía no impacta en el AMBA. En este caso, la baja superó ampliamente la tendencia general.
Rubros más golpeados
La sensación de ajuste se profundiza en múltiples frentes:
-Indumentaria y calzado: cayó 19,1 % interanual, siendo una de las principales responsables del derrumbe del IC
-Transporte y combustibles: con una retracción del 8,9 %, tanto en consumo de nafta como en movilidad en general
-Recreación y cultura: también mostró una caída fuerte, del 19,7 % interanual
-Supermercados y productos esenciales: los alimentos registraron una retracción que, aunque no tan pronunciada como otros rubros, también contribuyó al desplome general
¿Por qué se derrumba el consumo?
Pérdida del poder adquisitivo: la inflación, aunque en desaceleración, todavía se mantiene en niveles elevados (alrededor de 1.5 %–2 % mensual a julio), erosionando los ingresos reales de los hogares
Restricción crediticia y endeudamiento: si bien el uso de tarjetas creció, la restricción en el acceso al crédito y los límites presupuestarios golpean a los consumos no esenciales
Recesión y recortes por políticas macroeconómicas: ajustes del gasto público y tarifas en alza, junto a una reducción de subsidios, impactan en la capacidad de consumo
Cambio en los hábitos de compra: se consolida una búsqueda activa de ofertas y marcas más económicas, particularmente en alimentos y productos básicos
Reacciones del mercado y de las consultoras
La CAC advirtió que la caída fue “la peor desde la pandemia” en junio y que en julio no sólo se profundizó el retroceso, sino que también se evidencian señales de estancamiento en la recuperación
La confianza del consumidor mostró una leve mejora del 1,97 % en julio respecto a junio (suba interanual del 18,6 %), pero sigue en terreno débil con un ICC de solo 46,4 sobre 100
¿Qué puede ocurrir en lo que queda del año?
La CAC concluye que es “urgente recuperar el ingreso real de los hogares”, pero advierte que los últimos ajustes fiscales aún no han alcanzado este objetivo
Expertos señalan que un impulso sostenido del crédito y mejoras en la confianza podrían revertir parcialmente la mala racha, aunque el proceso será lento y desigual entre el AMBA y el interior.