
Luego de las remarcaciones de los proveedores de alimentos, bebidas y productos de primera necesidad, el Gobierno salió a pedirle a los supermercadistas que "no acepten locuras" para que no comience a descontrolarse la inflación, en puertas de las dos elecciones más decisivas.
El ministro de Economía, Luis Caputo, solicitó a los empleados del sector a través de la secretaría de Comercio que no convaliden ajustes superiores al 4%, pese a que la devaluación llegó a un pico del 14%.
Como informó PolíticaYMedios, las principales empresas acercaron listados con incrementos de entre el 3% y el 9% días atrás, lo cual podría sacudir los guarismos del INDEC para el IPC de agosto, que contará con aumentos en una gran cantidad de rubros, pero relativamente controlados.
En este contexto, Caputo y el presidente, Javier Milei, recibieron un espaldarazo en las últimas horas desde Rosario, donde el titular de la Cámara de Supermercados, Sergio Casinerio, aseguró que realizarán un “frente de batalla” y “no encargarán pedidos” sobre los productos que registren aumentos.
A pesar de ya haberse anunciado la remarcación de precios, Casinerio sostuvo que “todavía no llegaron las listas”, señalando en diálogo con Radio LT3 Rosario : “Se habla de aumentos del 4%, 6% y 9% pero no han llegado aún. Todavía no los recibimos”.
Sobre el poder adquisitivo del consumidor, el presidente de la Cámara de Supermercados rosarina explicó que el cliente “elige en base a los precios y al salario que percibe”, y remarcó la aparición de “segundas marcas” como el “reemplazo” de las líderes.
“Aparecieron segundas marcas, que no pertenecen a las líderes, sino que son PyMEs (Pequeñas y Medianas Empresas) que reemplazan a las grandes marcas. Han crecido mucho sus ventas”, aseguró.
A su vez, remarcó que el porcentaje de los sueldos que van destinados a la compra de alimentos disminuyó: “Han aumentado otros servicios muy por encima del incremento de los alimentos”, subrayó.
También detalló un crecimiento en el consumo de cerdo y pollo por sobre el de la carne y un deterioro en la compra de productos de limpieza.
“En artículos de limpieza la gente sólo compra lavandina. Ya no elige productos antigrasa, o para el baño o la cocina. La eligen para realizar la limpieza general. Están volviendo al uso de la gente, es un tema de precios”, concluyó.
En un contexto de incertidumbre y luego de una escalada alcista del dólar durante la semana pasada, distintas empresas aplicarán aumentos de entre 3% y 9% en alimentos, bebidas, artículos de limpieza y otros productos.