
El fenómeno polar acontencido en los últimos días desnudó una vez másla fragilidad del sistema energético de nuestro país que arrastra años atraso tarifario e inestabilidad macroeconómica.
El consumo récord de gas natural que se experimentó esta semana llevó al sistema al límite de su capacidad, lo que provocó tres reuniones del Comité Ejecutivo de Emergencia en menos de 24 horas. Este comité reúne al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) junto a las empresas transportistas y distribuidoras.
Según informó Infobae, las medidas adoptadas para asegurar el abastecimiento prioritario a los hogares incluyeron la interrupción del suministro de gas a las industrias —incluso aquellas con contratos firmes “con ventana”—, cortes de 24 horas en estaciones de GNC y una restricción parcial de las exportaciones de gas a Chile.
Mientras se definían las restricciones al consumo de gas, el ministro de Economía, Luis Caputo, firmó con Paraguay un Memorándum de Entendimiento para evaluar la viabilidad de exportar gas a ese país y llegar a Brasil. Con este último, se alcanzó un acuerdo similar a finales del año pasado, que ya ha permitido algunos envíos.
La Secretaría de Energía, liderada por María Tettamanti, confirmó los trascendidos a través de un comunicado emitido pocas horas después: “Como consecuencia de la situación crítica del sistema y las limitaciones operativas en la inyección de gas, se interrumpió el suministro a contratos firmes de GNC e industrias en amplias regiones. El corte afecta a Buenos Aires Norte, Centro Norte, Litoral, Norte, Noroeste, Cuyo y Sur. En otras partes del país, se limita el suministro en contratos interrumpibles y, en algunas localidades, se reduce a mínimos técnicos incluso en contratos firmes.
Al mismo tiempo, el aumento en la demanda de gas se combinó esta semana con fallas técnicas en la producción de algunos yacimientos de Vaca Muerta y problemas en el transporte, lo que redujo la capacidad operativa del gasoducto Perito Moreno (ex Néstor Kirchner) al 70%, según fuentes oficiales.
La situación también provocó interrupciones en el servicio eléctrico. Durante la madrugada del martes, la distribuidora Edesur emitió un comunicado en el que afirmaba que “debido a inconvenientes en la generación de energía ajenos a la empresa, se realizan cortes preventivos de suministro en ciertos barrios de su área de concesión”. Así, 100.000 usuarios del AMBA se quedaron sin suministro en una de las noches más frías del año, cuando muchos edificios funcionan únicamente con electricidad.
Este período de bajas temperaturas comenzará a ceder a partir de este jueves 3 de julio, por lo que tanto el Gobierno como las empresas siguen de cerca la situación.