Vecinos de distintos barrios de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense se sumaron este miércoles por la noche a un cacerolazo espontáneo en apoyo a los jubilados y rechazando la brutal represión policial ocurrida durante la marcha en el Congreso. Arribando a la medianoche, una multitud se concentraba en Plaza de Mayo.

A medida que iba cayendo la tarde, y con las imágenes de brutales ataques a adultos mayores, manifestantes y hasta periodistas, los cacerolazos comenzaron a hacerse sentir espontáneamente en diferentes barrios de Capital Federal, el conurbano y el resto del país.

En la medida que también se hicieron virales las imágenes de los vecinos blandiendo sus utensilios al unísono, la comunidad comenzó a agitar una nueva movilización nocturna hacia los alrededores de la Casa Rosada para ahcer sentir el descontento.

El eco de las cacerolas resonó en barrios como Palermo, Almagro, Caballito, Colegiales, Villa Crespo, Chacarita, Recoleta y otros barrios porteños, mientras que en la provincia de Buenos Aires se registraron protestas en Avellaneda, Ramos Mejía, Morón, San Martín y Vicente López, entre otros distritos.

Entre otras escenas que conmocionaron a la sociedad, circularon imágenes de una jubilada cayendo noqueada por el golpe de un agente, el padre "Paco" Olveira -de reconocida obra en los barrios carenciados con jóvenes con consumos problemáticos- siendo cercado por la policía y también el momento en que el fotógrafo Pablo Grillo, era alcanzado por un proyectil disparado que impactó en su cabeza.

El joven sufrió graves heridas y debió ser intervenido quirúrgicamente luego de que un cartucho de gas lacrimógeno le partiera el cráneo mientras intentaba realizar una toma. Su caso adquirió mayor gravedad cuando la ministra de Segurida Patricia Bullrich aseguró que era un "militante kirchnerista" y que se encontraba detenido, mientras se desarrollaba la cirugía para intentar salvarle la vida. Actualmente, Grillo se encuentra en grave estado y el pronóstico es reservado.

Cerca de las 22, una caravana de personas comenzó a avanzar por la avenida Corrientes en dirección a Plaza de Mayo, donde continuaron las protestas contra el Gobierno de Javier Milei y su política de seguridad. Según se observó en C5N, la multitud reclamó el fin de la represión y exigió la renuncia de Bullrich, en medio de una jornada de máxima tensión política y social.