La crisis golpea al sector alimenticio: Sancor y Granja Tres Arroyos despidieron a más de 400 trabajadores - Política y Medios
18-02-2025 - Edición Nº6227

PREOCUPANTE

La crisis golpea al sector alimenticio: Sancor y Granja Tres Arroyos despidieron a más de 400 trabajadores

La cooperativa láctea envió 350 telegramas y tiene 3 de sus 5 plantas operando lejos de su máxima capacidad. Por su parte, la avícola líder en Argentina -que ya cerró una planta- removió a unos 100 empleados y prevé achicar más los gastos.

A contramano de la recuperación económica que agita el Gobierno y sus simpatizantes, la crisis económica cala cada vez más hondo y comenzó a golpear a empresas alimenticias. SanCor y Granja Tres Arroyos despidieron personal en las últimas horas, sumándose a una extensa lista de empresas que iniciaron el año reduciendo su planta por una caída en la producción.

La cooperativa láctea envió hasta el momento unos 350 telegramas de despido, mientras que la reconocida firma de la industria avícola cesó unos 100 en el día de ayer y ofreció a 400 empleados trabajar con una reducción del 50% del sueldo.

Las compañías acusan la crisis económica, que manifiesta su costado más cruel al exponer la dramática reducción de la demanda de productos de la canasta alimenticia básica.

Días atrás, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, había publicado un comunicado cuestionando duramente el modelo económico del presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, basándose precisamente en la caída que experimentó el consumo de carne y pollo durante 2024.

La situación de los lácteos no es mucho mejor: SanCor procesa, al día de hoy, unos 200.000 litros diarios. Trabajando muy por debajo de su capacidad instalada, el directorio dio inicio a un plan de reestructuración, despidiendo a cientos de trabajadores que -como parte de una fase previa- se encontraban en régimen de "jornada libre".

Los despidos llegaron como la crónica de una muerte anunciada, luego de que todo un segmento de personal se fuera quedando paulatinamente con menos tareas a cargo, al punto de que muchos ni siquiera tenían labores asignadas.

El telegrama recibido por los 350 empleados despedidos expresa: "Por las razones de fuerza mayor ajenas a la voluntad de la compañía, que son de público conocimiento, prescindimos de sus servicios a partir del día de la fecha (Art. 247 LCT) indemnizaciones, liquidación final y certificados de trabajo – CFR Art. 247 a su disposición en términos de ley – Conste”.

No obstante, se espera que en el futuro próximo el número de cesados podría continuar en aumento, ya que de las cinco plantas productivas sólo tres se encuentran operativas y lejos de la capacidad productiva que tienen.

Dentro de la estrategia del directoria se encuentra la búsqueda urgente de un inversor, pero al momento el panorama es gris para una de las compañías que supo acomodarse entre las líderes del mercado nacional.

Granja Tres Arroyos fue noticia en el día de ayer por el despido de unos 100 empleados, que organizaron una movilización frente a la planta de Concepción del Uruguay en Entre Ríos.

 Se trata de la principal compañía de la industria avícola en el país con ocho plantas de producción, una faena estimada de 700.000 pollos por día y una facturación anual estimada en US$1.300 millones.

La firma de Joaquín de Grazia también hablan de crisis y viene reduciendo su planta. Ya en diciembre del año pasado solicitó a la Secretaría de Trabajo iniciar un Procedimiento Preventivo de Crisis, alegando que el cierre del mercado Chino como destino de sus productos había trastocado sus dinámica operativa.

Hacia fines del 2024 había cerrado la planta de producción de Tristán Suárez, reubicando sólo una parte del personal que allí se desempeñaba.

Ayer, mientras los trabajadores protestaban en Concepción del Uruguay por los 65 telegramas de despido, la Federación de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (FTIA) denunció que se habían enviado al menos 100, a través de un comunicado donde también denunciaron la reducción de sueldos y amenazas de más despidos desde la empresa.

Mientras desde el gremio exigen la inmediata reincorporación de los despedidos, el plan de la compañía se orienta en la dirección inversa, con lo cual la situación es de alta incertidumbre no sólo para los despedidos sino también para el personal que aún conserva su fuente laboral.

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