Fragmentación en la UCR: el dilema de Lunghi y la lucha por la conducción provincial - Política y Medios
15-09-2024 - Edición Nº6071

POLÍTICA BONAERENSE

Fragmentación en la UCR: el dilema de Lunghi y la lucha por la conducción provincial

La interna del radicalismo en la provincia de Buenos Aires refleja las tensiones nacionales del partido. Si bien hay un clamor general por la unidad, las diferencias estratégicas y los antiguos rencores dificultan la posibilidad de alcanzar un consenso.

Por: Miguel Di Spalatro

 

La participación del intendente Miguel Lunghi en el espacio Futuro Radical ha generado una serie de reacciones dentro del radicalismo en Tandil y en la provincia de Buenos Aires, en un momento donde la UCR enfrenta una fragmentación notable. Con las elecciones internas para las nuevas autoridades del Comité Provincial el próximo 6 de octubre, las tensiones dentro del partido son evidentes, reflejando la pérdida de identidad que la UCR ha experimentado en su alianza con Cambiemos.

Miguel Lunghi, intendente de Tandil desde 2003, es considerado un símbolo del radicalismo bonaerense. Desde hace dos décadas gobierna su ciudad, y hasta ahora había evitado involucrarse de manera directa en la política partidaria provincial. Recientemente, ha surgido la posibilidad de que Lunghi asuma un rol más protagónico dentro del partido, ya sea como presidente del Comité Provincial o como cabeza de la lista de delegados para la Convención Nacional. Esta oferta viene del sector liderado por Martín Lousteau y Facundo Manes, quienes buscan consolidar una estrategia de renovación dentro del partido. Lunghi duda sobre aceptar, ya que “no le gusta la doble función”, refiriéndose a la exigencia de compaginar su labor como intendente con un rol partidario a nivel provincial.

El senador Maximiliano Abad, quien ha dirigido la UCR bonaerense en los últimos años, está llegando al final de su mandato sin un sucesor claro. Abad impulsa la candidatura de Miguel Fernández, ex intendente de Trenque Lauquen, quien cuenta con un amplio apoyo entre los intendentes radicales. Sin embargo, la posibilidad de que Lunghi asuma un rol de liderazgo genera incertidumbre y expectativas entre los afiliados. Fernández ha mostrado una trayectoria sólida en su distrito y ha sido un defensor de la Ley que limita la reelección de los intendentes, una postura que lo diferencia de Lunghi, quien va por su sexto mandato consecutivo. En relación con la reelección indefinida, Fernández ha afirmado que “la alternancia es una herramienta que debe utilizarse para establecer el sistema democrático”, destacando la importancia de renovar equipos e ideas para evitar el desgaste que conlleva la falta de renovación. Para Fernández, el equilibrio entre la experiencia y la alternancia es esencial para una gestión exitosa.

Esta posición refleja una de las principales tensiones dentro del radicalismo de Tandil. Mientras algunos, como Fernández, abogan por la alternancia, otros consideran que la experiencia de Lunghi es lo importante. A pesar del desgaste que implica un sexto mandato consecutivo, muchos creen que la trayectoria de Lunghi sigue siendo un activo importante para el partido. Sin embargo, el "post-lunghismo" ya es un tema que preocupa a varios sectores dentro de la UCR local, incluyendo a Carlos Alberto Fernández (exdiputado y senador nacional, que fuera asesor del recordado caudillo tandilero Juan Carlos Pugliese), quien ha expresado su deseo de que la gestión de Lunghi sea sucedida por un recambio político que mantenga la misma orientación partidaria. Para Fernández, es crucial que la exitosa administración de Lunghi culmine con una transición que garantice la continuidad de las políticas que han marcado su mandato.

En cuanto al futuro liderazgo del radicalismo en Tandil, Marcos Nicolini, excandidato a intendente que compitió contra Lunghi, aparece como una figura joven con potencial para liderar el partido. Carlos Alberto Fernández, en una reciente entrevista, destacó “la persistencia de Nicolini” como una de sus virtudes, afirmando que, a pesar de haber enfrentado derrotas en el pasado, tiene un futuro prometedor dentro del radicalismo local.

La interna del radicalismo en la provincia de Buenos Aires refleja las tensiones nacionales del partido. Si bien hay un clamor general por la unidad, las diferencias estratégicas y los antiguos rencores dificultan la posibilidad de alcanzar un consenso. El espacio Futuro Radical, que busca consolidarse como una alternativa en las elecciones internas, ha sido impulsado por figuras como Lousteau y Manes, quienes buscan revitalizar el partido y ofrecer una alternativa a las políticas del kirchnerismo y de La Libertad Avanza. En este contexto, Miguel Lunghi, con su vasta experiencia y prestigio, sigue siendo un actor clave en la escena política, aunque su rol en el futuro del radicalismo bonaerense aún no está definido.

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