
El discurso del presidente de la Nación, Javier Milei, ante empresarios y líderes globales en el foro de Davos celebrado en Suiza dejó tela para cortar por lo inesperado, luego de enfocar su narrativa en la defensa del sistema capitalista y donde llegó a acusar a los líderes de occidente de estar cooptados por el socialismo.
Mientras el mundo esperaba un speech orientado a visibilizar las nuevas condiciones para la inversión en nuestro país tras el cambio de gestión, el mandatario nacional decidió disertar una suerte de clase de historia sobre el capitalismo como sistema y hacer énfasis en el presunto avance del socialismo bajo diferentes agendas globales.
Así, tras enaltecer al capitalismo de libre empresa como "la única herramienta que tenemos para terminar con el hambre y la pobreza en el planeta", arremetió contra las corrientes feministas y las causas climáticas, identificándolas como bastiones del nuevo socialismo al que llamó a enfrentar.
En la misma clave que desarrolló su campaña presidencial, el líder de La Libertad Avanza resaltó el carácter "justo y moralmente superior" del sistema económico defendido y, tras realizar un repaso de su desarrollo a lo largo de la historia humana, puso de relieve que llevó al mundo a ser "más rico, libre, pacífico y próspero que en cualquier otro momento de la historia".
No obstante, y con la desorientación general del público a cuestas, profundizó advirtiendo a los líderes políticos y financieros globales que "Occidente está en peligro" y acusó a de tender al socialismo a los representantes de este sector de la geopolítica.
"Aquellos que supuestamente deben defender sus valores se encuentran cooptados por una visión del mundo que inexorablemente conduce al socialismo y en consecuencia a la pobreza", subrayó el jefe de Estado.
Para fundamentar su revival de la Guerra Fría, a 10 meses de cumplirse los 35 años de la caída del Muro de Berlín, Milei expuso que las ideologías de izquierda mutaron y actualmente "atacan al capitalismo por una cuestión de moralidad".
“Dado el estrepitoso fracaso de los modelos colectivistas y los innegables avances del mundo libre, los socialistas se vieron forzados a cambiar su agenda. Dejaron atrás la lucha de clases basada en el sistema económico para reemplazarla por otros supuestos conflictos sociales… pic.twitter.com/sfvPcPeG2O
— Oficina del Presidente (@OPRArgentina) January 17, 2024
De pasada, despotricó contra la justicia social asegurando que "no aporta al bienestar general" de las poblaciones porque "se financia a través de impuestos que se cobran de manera coactiva", en un trance de entusiasmo quizás demasiado ceñido a la gramática política y cultural de nuestro país ante un público -cuanto menos- ajeno al glosario.
Sobre nuestro país, omitió enfatizar las ventajas u estímulos que puntualmente viene a ofrecer su administración para invertir, y se dedicó a fustigar las "prácticas colectivistas", remarcar que se "abandonó hace 100 años el modelo de la libertad" y adjudicarle a este proceso la pobreza.
"El empresario exitoso es un benefactor social que lejos de apropiarse de la riqueza ajena, contribuye al bienestar general. En definitiva, un empresario exitoso es un héroe", sentenció.
Por ese motivo, instó a a los presentes a que "no cedan al avance del Estado" porque "no es la solución, sino el problema en sí mismo".
En otro tramo de su discurso, Milei enlazó la "agenda del feminismo radical" con la mencionada intervención estatal, denunciando que plantea una "pelea ridícula y antinatural entre el hombre y la mujer".
Como para no dejar frente de batalla sin abrir, sobre el final alertó que "otro de los conflictos que los socialistas plantean es el hombre contra la naturaleza", y en un confuso pasaje asoció a la protección del entorno ambiental por los peligros del cambio climático con "mecanismos de control poblacional o en la agenda sangrienta del aborto".
Resulta difícil calcular las consecuencias de la exposición, tanto por su extravagante contenido como por la ausencia de aquello que la audiencia acudía a escuchar, en la opinión pública internacional. Por lo pronto, las conclusiones de analistas en las horas posteriores confluyen en que, de base, se trató de una oportunidad desperdiciada en términos de atracción de flujos de inversión.