Alberto Fernández sostuvo este lunes que hay que despenalizar y legalizar el aborto en Argentina. Así, el primer mandatario reafirmó lo que ya había manifestado días atrás y resaltó que la interrupción del embarazo "hoy en día es un delito y obliga a las mujeres que lo practican a hacerlo de manera clandestina".
En ese sentido, el presidente detalló que la diferencia está en la cuestión de posibilidades que las mujeres tienen a la hora de recurrir a la práctica: "Las que tienen recursos van a un lugar privado y eso se convierte en un certificado por aborto espontáneo: las que no los tienen, en el mejor de los casos. quedan estériles y en el peor, mueren".
"Hay que terminar de una vez con esta discusión que es parte de la hipocresía argentina", enfatizó y completó: "La legalización es para que todos puedan tener acceso para tener la atención adecuada",