A pesar de repuntar en algunas
encuestas, el presidente
Mauricio Macri aún conserva una imagen complicada en el conurbano bonaerense. Esto no sólo podría complicar la reelección de
María Eugenia Vidal sino también la de intendentes de
Cambiemos que buscarán retener el poder en distritos donde el peronismo parece recuperarse.
Tal es así que, ante el temor de perder grandes centros urbanos, desde dos gobiernos municipales oficialistas consideraron beneficioso llegar a un acuerdo para que Cambiemos pueda colgar la boleta de María Eugenia Vidal a otros candidatos presidenciales, fundamentalmente en una hipotética candidatura de Sergio Massa por fuera del kirchnerismo.
"La Gobernadora es muy valorada y si la quieren acompañar sectores que no sean de Cambiemos, para mí mejor", dijo ayer el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, al portal Zona Norte Diario.
Por otra parte, el presidente del Concejo Deliberante de Lanús, Marcelo Rivas Miera, dijo ante Diario Conurbano que "me encantaría que otros más llevasen la boleta de Néstor Grindetti". Además, sostuvo que una lista colectora con otra fuerza política "le haría muy bien a María Eugenia Vidal y a todo el espacio".
Adentro de Cambiemos ubican a Macri diez puntos por debajo de Vidal en la provincia. Esa diferencia se acentúa en el Conurbano. Se sabe, el arrastre "para abajo" podría tener como los más perjudicados a los intendentes de esa región y derrotas en esos distritos harían temblar la reelección de ellos y de la Gobernadora. Por eso alientan un acuerdo con Massa, hoy más cerca del PJ que de Cambiemos.