Los diputados bonaerenses de Cambiemos Guillermo Castello y Matías Ranzini presentaron un proyecto para prohibir la denominada actividad de los "trapitos" o "cuidacoches" en el territorio de la provincia de Buenos Aires.
En el artículo 1 del proyecto, los legisladores establecen con claridad que prohíben "la actividad de cuidacoches y de limpiavidrios sin autorización legal" en el ámbito de la provincia porque "supone una acción dañosa o de peligro para los bienes individuales o colectivos protegidos".
Además, caracterizaron que dicha actividad implica "una conducta de imposición y coerción del autor de la conducta tipificada no asimilable a una sociedad civilizada".
Lo insólito del proyecto son las sanciones. "Será sancionado con multa del dos y el diez por ciento del haber mensual del Agente de Seguridad de la Policía de a Provincia de Buenos Aires y penas de uno o dos días de arresto". Cabe remarcar que quines desarrollan la actividad de cuidacoches lo realizan frente a una situación económica y social que no les permitiría pagar ningún tipo de multas.
Según detalló Castello en diálogo con Radio Provincia, serían los municipios quienes estén habilitados para otorgar permisos a los "trapitos". "Para terminar con el apriete y la extorsión y recuperar el espacio público para los vecinos, presentamos con el diputado Matías Ranzini un proyecto que prohíbe los “trapitos” y limpiavidrios en la Provincia", agregó.
Por su parte, Ranzini sostuvo que las "las calles y las veredas son de todos, y donde está permitido, todos tenemos derecho a estacionar gratis. Hay que cortar con la extorsión y el miedo por parte de esta gente para vivir más tranquilos".