
El temporal del último viernes provocó daños irreparables en buena parte de los invernaderos y plantaciones del cordón frutihortícola de La Plata y, por estas horas, los trabajadores se organizan para elevar un petitorio en que detallarán las graves pérdidas que sufrió el sector y exgirián solucines para las 1.000 familias que resultaron afectadas por la tormenta. Así, este martes a la tarde, representantes de organizaciones de la zona mantendrán una reunión con autoridades de Jefatura de Agroindustria de la Provincia.
Según detalló María Eugenia Ambort -referente del Movimiento de Trabajadores Excluídos, MTE- en su diálogo con Política&Medios, diferentes organizaciones de trabajadores de la tierra se reunieron para hacer una evaluación conjunta de los daños ocasionados por el temporal del viernes último. De ese análisis, dijo, se desprendió que "alrededor de 1000 familias del Cinturón resultados realmente afectadas".
Invernaderos destruídos, casillas que se volaron o rompieron por el granizo y cortes de luz que, en algunos casos, perduran hasta hoy, son algunos de los daños más graves que sufrió el sector, siendo Abasto, Lisandro Olmos y Colonia Urquiza las zonas con mayor destrucción.
"Estamos pidiendo una ayuda inmediata que tiene que ver con materiales de construcción para recuperar las casillas y generadores de electrcidad para poder salvar lo que quedó", expresó Ambort y agregó "se está pidiendo también una ayuda económica para cada familia para levantar los invernaderos y un quit de siembras".
Del mismo modo, la mujer confirmó que este martes pasado el mediodía, las organizaciones de quinteros se reunirán con autoridades de Jefatura de Agroindustria de la Provincia. Y detalló que, aunque la primera respuesta por parte del Municipio fue "rápida" se espera que eso no se diluya y que estén "a la altura de lo que fue el temporal", ya que en situaciones similares en el pasado, "las respuestas siempre han sido insuficientes y tardías".
Así las cosas, Ambort dijo que las afecciones del temporal no son la única preocupación de los quinteros y que las consencuancias de la lluvia son más difíciles de llevar por el estado de abandono que atraviesa el sector: "Venimos sufriendo una crisis prounda; el costo de la producción es en dólares y la venta es en pesos y a eso se suman los tarifazos en electricidad y combustible. Algunas familias estamos pagando tarifas absurdas, más de 20 mil pesos mensuales por quinta", resumió.