A una semana de la segunda vuelta electoral que definirá al futuro presidente de Brasil, el candidato de ultraderecha, Jair Bolsonaro, encabeza todas las encuestas. Diversas consultoras le dan alrededor de 15 puntos de ventaja sobre el candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Fernando Haddad.

En ese marco, en uno de sus últimos discursos de campaña, Bolsonaro amenazó a los miembros del Partido de los Trabajadores, aseguró que el expresidente Lula se va “a podrir en la cárcel”, y aseguró que su rival, Fernando Haddad, también irá a prisión luego de las elecciones.

“Esos marginales rojos serán prohibidos en nuestra patria”, aseguró Bolsonaro en uno de los discursos más violentos de la campaña electoral.

Bolsonaro afirmó que los miembros del PT: “perdieron ayer (en clara referencia a la dictadura), perdieron en 2016 (en alusión al golpe parlamentario contra Dilma Rousseff) y van a perder la semana que viene de nuevo (en referencia al balotaje)”.

“Ahora la limpieza será mucho más amplia. Esa banda, si quiere quedarse aquí, va a tener que someterse a la ley de todos. O salen fuera o van a la cárcel”, aseguró.

El próximo domingo 28 de octubre se definirá quien gobernará Brasil durante el período 2019-2023 y Bolsonaro es el candidato más firme. Las elecciones se realizan en el marco de un gobierno de facto (de Michel Temer), producto de un golpe parlamentario contra Dilma Rousseff, con uno de los principales estados intervenidos militarmente (Río de Janeiro), tras el asesinato político de la concejala Marielle Franco (las pericias determinaron que las balas que mataron a Franco pertenecían a la Policía) y con la persecución mediática, judicial, el encarcelamiento arbitrario y la proscripción ilegal del principal candidato y líder del Partido de los Trabajadores, el expresidente Luiz Inacio Lula Da Silva.