Causa Malvinas y Proyecto Nacional - Política y Medios
28-03-2024 - Edición Nº5900

Causa Malvinas y Proyecto Nacional

En el marco del 33° aniversario del conflicto por la recuperación de las islas, una serie de sucesos consolidaron el accionar popular de la Patria Grande. Por decisión política de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se ordenó la desclasificación de los archivos secretos durante la dictadura, con el fin de avanzar desde la verdad y reforzar aún más los reclamos internacionales.

Es de público conocimiento que desde 1833 Gran Bretaña utiliza las Islas Malvinas como enclave colonial. Junto a Guayana Francesa constituye el segundo territorio de América Latina ocupado por potencias extranjeras.

De los 16 enclaves del mundo, 11 pertenecen a Inglaterra, que hace oídos sordos frente a los reclamos internacionales. En la cuestión Malvinas, la estratégica posición del archipiélago como fuente de recursos naturales y dominio geopolítico dificulta aún más el diálogo. Cabe recordar que tras el conflicto bélico de 1982, el gobierno argentino logró más de 40 resoluciones a favor en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además contó con el apoyo de diversas cumbres iberoamericanas, de América del Sur y África, más organismos internacionales como el Grupo de los 77 países más China.

Según fuentes de la Subsecretaría de Asuntos de Malvinas perteneciente al Ministerio de Relaciones Exteriores argentino, el último diálogo bilateral oficial entre Argentina y Gran Bretaña acerca de la soberanía ocurrió en 1981. Allí, en plena dictadura, se mencionó el derecho argentino sobre las islas. Un año después sucedió la historia conocida por todos: una guerra ciega y absurda que llevó a la ruina a una generación entera.

Desde Ushuaia y por el acto central del 33° aniversario del inicio de la guerra, Cristina Fernández de Kirchner explicó que instruyó al Ministerio de Defensa para que "en un plazo de 30 días hábiles" se desclasifiquen "los registros de los archivos" de las instituciones militares.

A raíz de estos documentos escondidos por las Fuerzas Armadas durante décadas, la investigación por las aberraciones cometidas –que fue clausurada por la Corte Suprema de Justicia de la Nación el 19 de febrero pasado- podría reabrirse si se eleva un recurso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Es que en los diversos regimientos donde quedaron asentadas las denuncias se registra la sistematización de las torturas a conscriptos que participaron de la guerra.

Según el diario Tiempo Argentino que tuvo acceso a algunas de las actas secretas, en la Compañía B del Regimiento de Infantería 3, un soldado (se preserva la identidad) escribió: "Una vez cazaron un cordero los suboficiales ordenaron cocinarlo a unos soldado. Uno de ellos fue y me dio un trozo de hígado. Al enterarse, el subteniente Flores me estaqueó. El cordero era para el personal de cuadros, sólo lo que sobraba era para los soldados. En otras ocasiones nos castigaba poniendo los pies en charcos de agua por espacio de una hora y media. Uno de ellos fue el cabo 1º Cancino quien una vez me orinó en la espalda después de pegarme".

Este tipo de testimonios forman parte de las actas de recepción escritas en Campo de Mayo por los ex combatientes al regreso del conflicto. Los testimonios se toparon con una orden militar: “nada de lo vivido en el archipiélago debía trascender públicamente”.

"Hoy tenemos 120 denuncias. Cuando esto tome estado público van a ser muchas más. Hubo una práctica generalizada y sistemática de torturas y asesinatos. Son crímenes de lesa humanidad y ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos plantearemos que el Estado argentino, a través del Poder Judicial, y especialmente la Corte Suprema de Justicia, nos impidió avanzar en la investigación”, destacó Jerónimo Guerrero Iraola, coordinador del equipo jurídico del CECIM-La Plata.

La vuelta de Dardo Cabo a Malvinas en versión 2.0

Un hecho curioso ocurrió tras el 33° aniversario de la guerra en dos sitios web con extensión británica (.fk): su contenido original fue suplantado con un video en el que se ven imágenes de soldados argentinos durante la guerra y suena el himno nacional bajo la frase #LasMalvinasSonArgentinas. Tras el hackeo las emisoras fueron quitadas del aire.

El hacker bajo el seudónimo “Líbero” se adjudicó la intervención en el Servicio de Radio de las Islas Falkland (FIRS, por sus siglas en inglés), http://www.firs.co.fk/, y en el Comité de Cuentas Públicas (PAC) de las Islas, www.pac.org.fk.

A través de su cuenta de Twitter, @LiberoamericaMu anunció: “voy a interrumpir la radio de las islas y poner la himno nacional”, quien informó que también hackeó la web del servicio de televisión de las Malvinas (http://www.ktvfitv.co.fk/), aunque el sitio apareció fuera de servicio. Identificado con el colectivo Anonymous, Líbero se refirió a la amenaza de militarización de las islas denunciada por el gobierno en el último acto del 2 de abril: “Ahora quieren atacar, con qué si no tienen sistemas seguros”, ironizó.

Según explicaron desde Anonymous la acción contó con la asistencia desde Indonesia e implicó una semana de análisis de la seguridad de los servidores de las islas, "quedó demostrado que es muy baja, su última actualización fue en 2011 y tiene las vulnerabilidades típicas de cualquier sistema".

Está acción directa versión 2.0 no hizo más que recordar la figura de Dardo Manuel Lito Cabo, quien el 28 de septiembre de 1966 vulneró el sistema de defensa británico en lo que se llamó el Operativo Cóndor. Junto a otros militantes, Cabo secuestró un avión y lo desvió hacia las islas. Allí el grupo plantó la bandera argentina en una muestra de coraje patriótico que le costaría 3 años en prisión. Si bien ambas acciones no tienen punto de comparación, resulta conveniente afirmar que el Cóndor sobrevoló una vez más las islas desde la historia hasta el presente.

La defensa inglesa en off side

Por un error de codificación, todo el sistema de defensa de las Islas Malvinas terminó en internet gracias a una falla en la seguridad del archipiélago. Es un documento que describe la colocación exacta de los campos de vuelo, consistencia del cemento de las defensas físicas y coordenadas GPS de cuarteles y depósitos de municiones. “Es un manual para la invasión perfecta", explicó una fuente militar citada por el Daily Mirror, quien determinó que la información apareció online en el sitio del ministerio de Defensa británico.

Esto se da en el marco de los anuncios en el aumento del presupuesto militar británico en las islas, por temor a una invasión argentina. Hecho que provocó fuertes críticas del gobierno nacional ante los organismos internacionales.

El ex ministro de Defensa británico, Liam Fox, sorprendió al mundo cuando señaló que el descuido "se trató de un error que no podemos permitirnos”. Por su parte desde el ministerio de Defensa inglés negaron que las informaciones sensibles hayan ido a internet, al tiempo que el link del documento aparece como desactivado.

La empatía popular con la causa Malvinas recorre el mundo

Leer el pedido de soberanía en clave latinoamericana obliga a reforzar el concepto de unidad en todo el continente. Tras siglos de saqueo de los recursos naturales por parte de España e Inglaterra y desde los inicios del siglo XIX con la injerencia de EE.UU, resulta imperioso analizar la importancia de estos enunciados.

Es que América toda da cuenta que la intención militar de Gran Bretaña, tras ocupar geopolíticamente las tierras, fue establecer una base militar de la OTAN ubicada en Monte Agradable (Isla Soledad). Desde allí las fuerzas de ocupación amenazan la seguridad de América Latina y controlan el pasaje interoceánico Atlántico/Pacífico al pretender avanzar en la Antártida y la plataforma continental argentina.

De no mediar una enérgica acción de la UNASUR, las islas quedarán bajo la expoliación de las potencias usurpadoras. Es que la colonización no solamente necesita razones y acciones políticas y económicas, sino también aceptación cultural.

Para dar esta pelea, la creación de foros de discusión continental integrados por intelectuales y académicos, apunta a este objetivo: afianzar el apoyo continental por la causa. Es claro, la lucha por la Causa Malvinas se da en todos los aspectos. Ahora, las plumas de la Patria Grande tienen el deber de aportar lo suyo.

Fuente: revista2016 Nº 66

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